lunes, 30 de septiembre de 2013

ASCENDENCIA LANZAROTEÑA DEL APELLIDO SARMIENTO (I)

FANEQUE HERNÁNDEZ BAUTISTA
JUAN RAMÓN GARCÍA TORRES

LA INFORMACIÓN DE NOBLEZA DE PEDRO SARMIENTO
LA INFORMACIÓN DE NOBLEZA DE PEDRO SARMIENTO
Esta nota a pie de página en el Nobiliario de Canarias (Tomo I pag 61) fue la que nos condujo a la información de limpieza de sangre de Pedro Sarmiento, hijo mayor de don Diego Sarmiento, hermanastro del I Marqués de Lanzarote:
“Pedro Fernández de Saavedra el mozo, segundo Señor de Lanzarote, tuvo en Doña Iseo de León, doncella noble, hija de Luis de León, de la Casa de los Señores de Marchena, a don Diego Sarmiento, de quien hay ilustre sucesión en Gran Canaria y Tenerife. La genealogía de los Sarmiento aparece presentada en la Inquisición, en 1622, por Don Diego Sarmiento, hijo de Don Pedro Sarmiento, Alguacil Mayor de la Inquisición de Canaria, y de Doña Fabiana Promontorio.
Los comentarios siguientes se los debemos a la pluma de Rumeu de Armas en su artículo Los Señores de Fuerteventura publicado en AEA quien evidencia con sus escritos su profundo conocimiento de los archivos históricos, en este caso el Archivo Histórico Nacional.
En 1605 Pedro Sarmiento de Ayala fue designado familiar del Santo Oficio de la Inquisición, y en 1610, ascendido a alguacil mayor del propio tribunal. Para posesionarse de ambos cargos tuvo que realizar en Lanzarote las pertinentes pruebas de limpieza de sangre. De ellas resulta que era hijo de Diego Sarmiento, también alguacil y de su esposa María de Ayala, nieto por línea paterna de Pedro Fernández de Saavedra el mozo, señor consorte de Lanzarote y de su concubina Iseo de León; bisnieto paterno-paterno de Hernán Darias de Saavedra, señor de Fuerteventura y de su concubina Catalina Escobar de las Roelas; y bisnieto paterno-materno de Luis de León el viejo y de su esposa Elvira Pérez.
Uno de los testigos, Juan Martín Cabrera el viejo, que contaba con más de 85 años en la
Castillo Sta. Bárbara, Guanapay

segunda de las informaciones, dice que “conoció a Hernán Darias de Saavedra, padre del dicho señor Pedro Hernández de Saavedra y a Luis de León el viejo, padre de la dicha Iseo de León, los cuales vinieron a esta ysla con doña Inés Peraza”. Dice también el testigo que “tiene noticia de Pedro Hernández de Saavedra el viejo, señor que fue de estas islas, padre del dicho Hernán Darias de Saavedra, rebisabuelo del dicho don Pedro Sarmiento de Ayala…” y en relación a Diego Sarmiento, su padre, nos dice que “doña Catalina de Escobar, la madre de Pedro Hernández de Saavedra, lo criaba junto a sus hermanas con mucho regalo”.
Hagamos ahora el recorrido contrario partiendo desde los Señores de las islas, primer eslabón de la escala genealógica que hoy les mostramos, hasta llegar a Diego Sarmiento el viejo, siguiendo, en primer lugar, las enseñanzas de Cebrián Latasa y de su Ensayo para un Diccionario de conquistadores:
Notas genealógicas sobre Diego de Herrera e Inés Peraza
Diego de Herrera, nacido en Burgos hacia el año 1422 era hijo del Mariscal Pedro García de Herrera y de María de Ayala. Se avecindó en Sevilla de donde llegó a ser 24 de su Concejo. Casó en Sevilla hacia el año 1448 con Inés Peraza, hija de Hernán Peraza el viejo y de Inés de las Casas. Hijos:
1. Pedro García de Herrera casado con Antonia de Ribera, a la que dio muerte, y con María Montemayor Lasso de la Vega.
2. Hernán Peraza casado con Beatriz de Bobadilla.
3. Sancho de Herrera casado con Violante de Cervantes y con descendencia en relación extraconyugal de Catalina Dafía. La tradición genealógica lo hace también casado en segundas nupcias con Catalina Escobar de las Roelas (¿)
4. María de Ayala casada con Diogo da Silva
5. Constanza Sarmiento I casada con Pedro Fernández de Saavedra
De nuevo Rumeu en el artículo ya citado de AEA nos presta ayuda, para no perdernos en la maraña genealógica, describiéndonos con pulcritud la descendencia de este último matrimonio:
Los hijos del matrimonio formado por Constanza Sarmiento I y Pedro Fernández fueron exactamente seis, cuyos particulares circunstancias pasamos a señalar:
1. Fernán Darias de Saavedra, segundo señor de Fuerteventura.
2. Sancho de Herrera, provincial de la Santa Hermandad de Andalucía y veinticuatro de Sevilla. Contrajo matrimonio con doña Ana Mallart, hija del inglés Tomás Mallart.
3. Fray Vicente Peraza, fraile del convento dominico de San Pablo de Sevilla, donde tomó los hábitos el 5 de abril de 1506. Fue promovido a la dignidad de obispo.
4. Doña Inés Peraza, que falleció soltera entre 1506 y 1510.
5. Doña Juana de Mendoza, casada con Juan de Pineda, escribano mayor del Cabildo de Sevilla.
6. Sor María de Ayala, monja profesa en Sevilla.
La línea tendrá continuidad, en un peldaño que se saltaron los genealogistas de Venezuela, a través del primogénito Fernán Darias de Saavedra, segundo señor de Fuerteventura, quien, casado con María de Sosa, esposa a la que repudió, tendría descendencia en relaciones extraconyugales con las lanzaroteñas Margarita Cabrera (Gonzalo de Saavedra) y Catalina Escobar de las Roelas (Pedro Fernández de Saavedra). ¿Puede ser Catalina Escobar la misma persona que la tradición genealógica hace esposa de Sancho de Herrera?
Lobo y Bruquetas en su obra Don Agustín de Herrera y Rojas I Marqués de Lanzarote nos ilustran con sus notas la continuidad del linaje:
“De la unión de Pedro Fernández de Saavedra el mozo con su tía doña Constanza Sarmiento II, (señora de Lanzarote, hija de Sancho de Herrera, primer señor de la isla, nacida de su unión con doña Catalina Dafía, de estirpe real indígena) nacería don Agustín de Herrera y Rojas futuro primer conde y marqués de Lanzarote; sin embargo Pedro Fernández también dejaría descendencia de la unión con su amante, Iseo de León, haciendo honor de este modo a la tradición familiar. Es por ello que el marqués de Lanzarote tendrá cuatro hermanastros, al menos, a los que ofrecerá protección y amistad tratándolos como tales hijos del mismo padre… Los hijos de Pedro Fernández de Saavedra e Iseo de León fueron: Diego Sarmiento que contraerá matrimonio con doña María de Ayala, de su misma estirpe, Francisco Sarmiento y Juana Sarmiento. También Pedro Fernández tuvo con una morisca de Lanzarote otro hijo llamado Juan de Saavedra”
De Iseo, la concubina del padre del marqués, nos aportan dichos autores que “casó más tarde don Guillén Peraza de Ayala y que se estableció en Gáldar en Gran Canaria desde donde se trasladaría a las Palmas y de allí emigraría a América”
De Diego Sarmiento el viejo, nuestro ascendiente, el mayor de los hijos de Iseo y Pedro Fernández recogemos que ostentó el cargo de Alguacil Mayor del Santo Oficio y que acogió a la marquesa y a la condesa cuando fueron evacuadas hasta Las Palmas mientras tenía lugar el ataque de Morato Arráez a Lanzarote (1586)
Acerca de la biografía de este personaje nos dice De la Rosa Olivera en su trabajo sobre los Bethencourt:
“Diego Sarmiento de Ayala Rojas y Sandoval, nacido en Lanzarote hacia 1535 y fallecido en Teguise en 1607, fue alguacil mayor del Santo Oficio de la Inquisición de Canarias desde julio de 1582. Casó hacia 1562, previa dispensa del cuarto grado de consanguinidad, con doña María de Ayala y Peraza, nacida en Sevilla hacia 1540, Señora de las Salinas de Lanzarote, fallecida en Gran Canaria en 1598, hija de Hernán Peraza Dumpiérrez, alguacil mayor del Santo Oficio, y de María de Ayala y Montemayor.”
Un extracto del testamento de Iseo en la carpeta del diocesano nos aclara los hijos habidos con Pedro Fernández, su amante, y con Guillén Peraza, su esposo, a quien no hay que confundir con el hijo de Hernán Peraza y Beatriz de Bobadilla, señores de La Gomera y El Hierro pues este es un vecino de Lanzarote de su mismo nombre:
-Testamento de Iseo de León. Casó con Guillén Peraza y tuvieron por hijos a D Diego Sarmiento, don Francisco; y a Elvira Pérez, mujer de Pedro Alarcón, y a Juan Peraza; hace imposición en Lanzarote.
El testamento que reseñamos a continuación otorgado por Hernán Peraza, cuyo extracto consta en la  Carpeta de Protocolos de Guía nos certifica también con fiabilidad la ascendencia de María de Ayala, la esposa de Diego Sarmiento así como el número y nombre de sus hermanos.
“Hernan Peraza, vecino y regidor de Gran Canaria, otorgó un testamento ante Lorenzo de Palenzuela escribano público el año de 1582 en el que declara que fue casado en el primer matrimonio con Doña María de Ayala, nieta de Pedro García de Herrera, y de segundo matrimonio casó con Doña Juana de Selada a la cual nombró por patrona de una capilla que él fundó de tres misas cada semana en la iglesia del convento de San Bernardo de esta ciudad y tuvo por sus hijos con la primera mujer a los siguientes: a Doña María de Ayala que casaron con D. Diego Sarmiento, Doña Catalina de Rivera que casaron con Francisco Palomares, Doña Inés Peraza que murió sin tomar estado, Doña Elvira que casaron con D. Pedro de Serpa, regidor de esta isla, que no tuvieron hijos; Juan Martel Peraza, regidor de Canaria; y del segundo matrimonio tuvo por sus hijos con la dicha Juana de Selada a Doña Ana y a Doña Sancha”.
Rumeu, utilizando como fuente la Información de limpieza de sangre de Pedro Sarmiento de 1610 que se encuentra en el A.H.N., nos dice que toda esa línea de la casa señorial de Canarias desciende de Pedro García de Herrera “el desheredado” y de su segunda esposa María de Montemayor y Lasso de la Vega. Pinto de la Rosa nos lo desmenuza con más claridad de este modo: María De Ayala, la esposa de Diego Sarmiento el viejo, es hija del regidor Hernán Peraza de Ayala y de su primera esposa María de Ayala Montemayor; nieta paterna de don Juan Peraza de Ayala y de doña Catalina Dumpiérrez y materna de don Cristóbal Montemayor y de doña Inés de Herrera, hermana del citado Juan Peraza de Ayala, hijos ambos de Pedro García de Herrera el desheredado y de la esposa citada. Sirva todo esto de confirmación de la dispensa en cuarto grado de consanguinidad que Diego y su esposa necesitaron para poder casarse en 1564, es decir, sus tatarabuelos comunes son los autodenominados reyes de las islas de Canaria don Diego de Herrera y doña Inés Peraza.

LOS DETONANTES DEL TRASLADO FAMILIAR
1. LA INVASIÓN DE CALAFAT EN 1569
Leamos atentamente lo que nos cuenta el viejo Rumeu de Armas (Piraterías y ataques navales contra las Islas Canarias Tomo 1, pág. 487) porque el siguiente párrafo no tiene pérdida en relación con la modesta investigación que hemos emprendido:
“La expedición de Calafat en 1569 tuvo honda repercusión en Lanzarote no solo por el terrible drama que provocó en la sociedad insular la cautividad de 200 personas (cifra impresionante para la población total) sino también porque el consiguiente pánico ocasionó el éxodo en masa a las islas mayores de las más destacadas familias. Así emigraron por aquellas fechas de Lanzarote: Hernán Peraza de Ayala Dumpiérrez (más adelante alguacil mayor del Santo Oficio en Gran Canaria) y su esposa María de Ayala (bisnietos ambos por línea legítima de Diego García de Herrera e Inés Peraza señores de las Canarias); los hijos de este matrimonio Juan Martel Peraza de Ayala, futuro regidor y capitán de Gran Canaria, y María de Ayala; el yerno de aquellos, casado con esta última, Diego Sarmiento de Ayala, futuro alguacil mayor del Santo Oficio y hermano del marqués de Lanzarote, como hijo que era de Pedro Fernández de Saavedra habido de sus amoríos con Iseo de León; esta última, Iseo de León, ahora esposa de Guillén Peraza, en unión de su hija natural Juana Sarmiento (la segunda esposa con el tiempo de Hernán Peraza de Ayala Dumpiérrez) y de su hija legítima Elvira Pérez, mujer de Pedro Alarcón Bethencourt, etc., etc., etc. Casi todas estas familias de Lanzarote se establecieron en la villa de Gáldar y luego acabaron por trasladarse a Las Palmas o emigraron a América”
2. LA INVASIÓN DE MORATO ARRÁEZ DE 1586
Más adelante, en el Tomo II, pág. 85, de su magna obra, Rumeu nos va a clarificar los motivos de una nueva huída de la matriarca de la familia. Entre los capturados en 1586 en la invasión de Morato Arráez, nos dice Rumeu, que junto a la marquesa Inés Benítez de las Cuevas y a la condesa Constanza de Herrera, estaban, entre muchas otras damas, María Luzardo, esposa de Enrique de Betancor (la abuela de Catalina de Barrios) y la mismísima Iseo de León (la madre de Diego Sarmiento), quien debió regresar a Lanzarote cayendo esta vez en las redes corsarias. Después de su rescate en el puerto de Arrecife debió ser tal su terror que embarcaría hacia Gran Canaria para no volver nunca más a su isla natal.
A pie de página el historiador nos completa la biografía de Iseo diciendo: “Iseo de León, hija de Luis de León el viejo y de Elvira Pérez y hermana de Luis de León, gobernador de Lanzarote, fue la concubina del señor de esta isla Pedro Fernández Saavedra, fallecido en Tafetán (Berbería) el año 1545. De estas ilícitas relaciones nacieron tres hijos: 1. Francisco Sarmiento (a quien veremos muy pronto embarcar en calidad de rehén en las galeras de Morato Arráez como garantía del tratado de paz firmado por su hermano el marqués de Lanzarote) 2. Diego Sarmiento, alguacil mayor del Santo Oficio en Gran Canaria, casado con María de Ayala (hija en primeras nupcias de Hernán Peraza de Ayala Dumpiérrez y de María de ayala) y 3. Juana Sarmiento casada con el suegro de su anterior hermano, Hernán Peraza de Ayala Dumpiérrez. Muerto su amante, Iseo de León contrajo matrimonio con Guillén Peraza naciendo de esta unión Elvira Pérez, la esposa de Pedro Alarcón Bethencourt. Años más adelante Iseo de León se trasladó con su hija legítima y su yerno a las Indias donde finalizaron sus días”.
Tenemos pues la fecha de 1569 como nítida referencia para el traslado hacia Gran Canaria de Diego Sarmiento con su familia (mujer y dos hijos por entonces) y la familia de su esposa (suegros y cuñados) lo cual concuerda con los datos de nacimiento de los hijos de Diego que aportan los genealogistas venezolanos: Pedro, nos dicen, nace en Lanzarote en 1566; Fernando en 1568, también en Lanzarote; y Agustín nace en 1569 pero ya en Gran Canaria en la Hacienda de El Agazal de Gáldar, topónimo que hemos podido situar gracias a la meritoria publicación digital Origen y noticias de lugares de Gran Canaria, cuyo autor es Humberto Manuel Pérez Hidalgo:
“El Agazal de Gáldar: Topónimo aborigen (¿) Este moderno caserío se encuentra situado junto a la carretera de San Isidro a Juncalillo. El nombre aparece ya en un documento de 1695 fecha en la que el regidor perpetuo Gonzalo Cabrejas Bethencourt declara ser propietario de la tercera parte del Cortijo del Agazal con agua para su riego, derecho de
El Agazal
albercón y una casas de alto y bajo y tres cuevas”.
Así pues Diego Sarmiento el viejo y su esposa María, hija de Hernán Peraza de Ayala Dumpiérrez, y sus hijos Pedro, Fernando y Agustín, están asentados a fines de 1569 en el norte de la isla de Gran Canaria en una hacienda que al parecer era parte de la dote. Así se señala en el boletín nº 4 del Instituto Venezolano de Genealogía: “fue dotada por su padre con 1000 doblas en bienes y esclavos y posteriormente le entregó 1000 doblas más con las que compró un heredamiento en Gáldar llamado El Aguazal (sic) por escritura ante Alonso Fernández de Saavedra a la que deben agregarse tres camellos aparejados que valían 1000 ducados, cierta cantidad de vacas y becerros, cuatro yeguas, un potro y una mula”.
Allí en El Agazal debieron nacer el resto de los hijos habidos en este matrimonio y hasta allí debió llegar Iseo de León, la madre de Diego Sarmiento, con su esposo Guillén Peraza después de su rescate en 1586.

DUDAS ACERCA DE LA DESCENDENCIA DE DIEGO Y MARÍA
Para conocer la prole completa de Diego y María contamos con la colaboración, vía Internet, de Instituto de Genealogía de Venezuela, tierra a la que se dirigió con el cambio de siglo gran parte de la familia. Observen que, extrañamente, en la lista publicada no aparece Diego Sarmiento el mozo, nuestro ascendiente:
(Monografias.com Descendientes de Diego García de Herrera y Ayala)
-Pedro Sarmiento, nacido en 1566 en Lanzarote, Alguacil Mayor de la Inquisición en Canarias cuyas ascendencias fueron protocolizadas en Caracas el 18 de mayo de 1617 ante Juan Luis Escribano.
-Fernando de Saavedra, nacido en 1568 en Lanzarote, fallecido en 1641, casado en Caracas con Ana de Rojas. Alcalde ordinario en 1612 de Santiago de León de Caracas y de la Santa Hermandad en 1613.
-Agustín de Herrera y Rojas nacido en 1569 en la hacienda El Agazal de Gáldar. Falleció en 1632 en Nirgua, Venezuela. Contrajo matrimonio con Leonor Violante Fernández en 1604 en Caracas, lugar donde ella había nacido. Tuvieron estos por hijos a Juan Sarmiento de Herrera (n. 1605), Francisco Sarmiento (1606), Juana Leonor Sarmiento (1607), Manuel Sarmiento (1609), Diego Sarmiento (1613), María de Ayala (1615) y Lucía Mauricia de Ayala (1620).
-Constanza Sarmiento nacida en 1571. Llegó a Venezuela al mismo tiempo que sus hermanos Agustín y Fernando y sus tíos Francisco Sarmiento y Elvira Peraza de Ayala.
-Juana Sarmiento, nacida en 1573, residente en Canarias. Recibió dote de sus hermanos Constanza y Agustín el 29 de diciembre de 1598 para contraer matrimonio con Pedro Westerling.
Una nueva aportación de Rumeu en su libro tantas veces citado Piraterías y ataques navales en Canarias nos permite precisar la fecha de la partida para América de la expedición familiar de los Sarmiento. Rumeu nos certifica con sus investigaciones que el 26 de junio de 1599 cuando Las Palmas era atacada por la escuadra de Van der Does y se concentraron en la plaza las cinco compañías que iban a defender la ciudad con sus respectivos capitanes al frente, uno de ellos, era el mismísimo Agustín de Herrera. “Del mando de la quinta compañía se encargó, por hallarse ausente su capitán titular, Juan Martel Peraza de Ayala en Tenerife, su alférez Agustín de Herrera y Rojas”. Acerca de este personaje, que usaba el mismo nombre y apellidos del marqués estando este en vida, nos dice Rumeu que debió ser sobrino suyo, hijo de Diego Sarmiento de Ayala, hermano bastardo del marqués. De esta manera, Martel sería tío por línea materna de su alférez, cosa harto frecuente en la época. Ambos parentescos hoy podemos confirmarlos.
La migración familiar tuvo que ser pues posterior al ataque naval holandés por lo que la dote otorgada por Agustín a su hermana Juana Sarmiento en 1598 fue con certeza anterior a la partida. La siguiente fecha segura con la que contamos es el casamiento en 1604 del citado alférez de las milicias canarias con una criolla venezolana. El viaje por tanto habría que encuadrarlo entre 1600 y 1603.
Unas notas de la monografía citada, leídas a posteriori, nos confirman, a pesar del cúmulo de errores que divulgan, algunos de los cuales hemos corregido en nuestra transcripción, las anteriores suposiciones:
Notas para Agustín de Herrera de Sarmiento y Rojas de Ayala:
“A partir de 1581, participa con las fuerzas del Conde de Lanzarote para ocupar la Isla
de Madeira hasta 1583. También participa en la defensa de Gran Canaria contra los corsarios ingleses Sir Francis Drake y John Hawkins en 1595; y en 1599, contra el ataque del Almirante holandés Pieter van der Does. Desde allí hizo Informaciones en Gáldar, siendo soltero, el 30 de abril de 1602; pasa a Venezuela junto con sus hermanos don Fernando de Saavedra y Rojas y doña Constanza de Sarmiento y con sus tíos don Francisco de Sarmiento, doña Elvira Pérez y don Pedro Alarcón de Bethencourt, para establecerse en Santiago de León de Caracas, donde se dedicó al comercio con las Islas Canarias. Aparece en las Actas del Cabildo de Caracas solicitando permiso para conducir a España el primer barco fabricado en Venezuela. Fue encomendero de Corocurumo y Llanos de Salamanca en 1604. Hacia 1623 pasó con su familia a residir en la ciudad de la Nueva Valencia del Rey. Murió flechado por los indios en la conquista de Nirgua hacia 1632, junto a su hijo don Francisco”

EL DESTINO DE DON FRANCISCO SARMIENTO
Las notas genealógicas de dicha página web nos precisan la fecha del traslado y confirman asimismo que don Francisco Sarmiento, el hermano de don Diego Sarmiento el viejo, emigró a Venezuela junto con sus sobrinos, Fernando, Agustín y Constanza, a los que nosotros añadimos, gracias a Rumeu, a su madre, Iseo de León y su hermanastra Elvira Pérez que viaja con su marido. Recordemos como curiosidad histórica y símbolo de su dudosa nobleza cómo el marqués, en el tratado de paz firmado con Morato Arráez de 1586 en el puerto de Arrecife, al no disponer de suficiente numerario para poder rescatar a su mujer y a su hija, marquesa y condesa de Lanzarote, y a otros 20 vasallos, admite la entrega como rehenes hasta que se saldase la cuenta de don Francisco Sarmiento, su hermano natural, y de Marcos de San Juan Peraza, uno de sus fieles vasallos. Ambos estuvieron cautivos en Marruecos, nos dicen Lobo y Bruquetas, al menos hasta 1591 fecha en la que la mujer de don Francisco, doña Sebastiana de Sosa, asegura en un protocolo firmado ante Lorenzo Palenzuela que su marido aún permanecía cautivo en Berbería.
Juan Ramón García Torres ha localizado recientemente un testamento que nos clarifica algunas cosas en relación con la familia de don Francisco. Se trata de las últimas voluntades de Pedro Sarmiento Ayala (el primo sembrador no el alguacil mayor del mismo nombre) dictadas ante Fernán García Saavedra, legajo 1049, en noviembre de 1613. En su testamento Pedro declara que era hijo de Francisco Sarmiento y Sebastiana de Sosa; que celebró matrimonio con Nicolasa Casañas; que con ella tuvo por hijos a Constanza Sarmiento, Juan Sarmiento, Manuel, Francisco y Agustín. Dice también que su padre y la hermana Inés (¿) estuvieron presos en Berbería. Deja por albaceas al Arcediano de Canaria don Pedro Espino de Brito, a don Pedro Sarmiento, su primo, y a su mujer, Nicolasa Casañas.

LITIGIO POR LA SUCESIÓN DEL MARQUESADO
Juan, el primogénito de los hijos de don Agustín de Herrera, nacido en Valencia, actual Estado de Carabobo, Venezuela, contrajo matrimonio con María Nicolasa de Loaysa y Villalobos en abril de 1632 en la ciudad de Caracas. Estos cónyuges, como podrán comprobar en el cuadro adjunto, serán los quintos abuelos de Simón Bolívar, el Libertador de América, o, dicho de otra forma, nuestros ascendientes Diego Sarmiento el viejo y María de Ayala fueron los séptimos abuelos del libertador. Conviene en este punto recordar a los componedores de la genealogía bolivariana que los octavos abuelos fueron por tanto Pedro Fernández de Saavedra el mozo y su concubina Iseo de León, la hija de Luis de León el viejo y de Elvira Pérez Hernández. Debe desestimarse en consecuencia que Diego fuera hijo de Constanza Sarmiento, como ellos mantienen, si bien es cierto que entronca efectivamente con los Señores de las Islas de Canaria al ser Pedro Fernández, su padre, nieto de Constanza Sarmiento I, la menor de las hijas de don Diego de Herrera y doña Inés Peraza de Ayala.
En el siguiente artículo, publicado en la red, Pleitos por la sucesión al marquesado de Lanzarote de José Mª Clar Fernández hemos encontrado unas singularísimas notas:
En el año 1643, en pleno litigio por la sucesión al Marquesado de Lanzarote, don Juan Sarmiento de Herrera y Rojas, natural y vecino de la villa de Valencia del Rey, en Venezuela, hizo petición de sus derechos sucesorios sobre el Marquesado de Lanzarote ante la Real Audiencia de Santo Domingo, en una exposición cuyo texto dice lo siguiente: El Alférez Mayor Real Don Juan Sarmiento de Herrera y Rojas, natural y vecino de la Coronada Villa de la Anunciación de Nuestra Señora de la Nueva Valencia del Rey, en la muy Leal y muy Noble provincia de Venezuela, hizo petición en dicha ciudad, a 20 de marzo de 1643, para testimonio de las informaciones hechas en la Gran Canaria y Lanzarote por sus tíos don Pedro Sarmiento de Herrera y don Fernando de Saavedra, y por su padre, don Agustín de Herrera y Ayala y constató en dichos instrumentos que el primer y último Marqués, don Agustín de Herrera y Rojas, tío de su citado padre, había muerto sin sucesión, y que aunque sus prenombrados tíos don Fernando de Saavedra y don Pedro Sarmiento de Herrera, hermanos de su padre, tuvieron hijos, ya habían muerto todos, por lo cual pidieron rehabilitación de los títulos de Marqués de Lanzarote y Conde de La Gomera, a favor de su sobrino, el solicitante”.
Creemos que andaba algo desnortado el candidato venezolano pues es el tercer marqués, no el primero, llamado como los dos anteriores, Agustín de Herrera y Rojas, quien fallece, siendo un niño, en 1632 dando lugar al problema sucesorio. Será su madre, Luisa Bravo de Guzmán, la que gane el litigio convirtiéndose en IV marquesa de Lanzarote. A pesar de que casó dos veces más (cuatro en total) no tuvo más descendientes. El nuevo litigio que se entabla entonces, en el que se personan los candidatos venezolanos, se resolverá a través de una sentencia judicial que otorga el V marquesado a su sobrino Fulgencio Bravo de Guzmán, quien asimismo morirá sin descendencia.
A la vista de todo ese jaleo, los dos autores de este trabajo nos estamos planteando, permítannos la broma, litigar ante la justicia para usurpar el derecho al título del actual XIX marqués de Lanzarote, un tal Luis Benítez de Lugo y Massieu. Puesto que Juan Ramón desciende de Pedro, el mayor de los hermanos y yo de Diego, el benjamín de la familia, creo que tengo esa batalla perdida.

¿CUÁNTOS DIEGO SARMIENTO HAY EN JUEGO?
Partida de Bautismo Iglesia de Santiago Apóstol - Gáldar, Libro 1 - Folio 26
"Maria, hija de Don Diego Sarmiento y de Doña Leonor de Quintana su legitima muger fue baptisada en esta dicha Yglesia fueron sus padrinos el Capitan Francisco de Carvajal y Doña Melchora su hija, todo lo qual fue fecho en dies y ocho dias del mes de Disiembre del año de mil y seissientos y seis tiene oleo y chrisma; fecho por mi. Bernardo de Riberol".
Esta es la partida de nacimiento de la única hija del matrimonio formado por don Diego Sarmiento de Ayala y doña Leonor de Quintana Castrillo. Cuatro años después, en 1610, en otro bautizo, en el que esta vez nuestro ascendiente ejerce no de padre sino de padrino, el sacerdote lo presenta como don Diego “el mozo”, es decir, que había ciertamente un Diego Sarmiento “el viejo” que era su padre homónimo según las costumbres de la época: el junior y el sénior que dirían los anglosajones. Estamos reconociendo por tanto que tuvimos dudas al respecto.
Por otra parte, hemos localizado en Gáldar en diciembre de 1619 la partida de matrimonio entre un tal Francisco Sarmiento, hijo de Diego Sarmiento y Juana Lorenzo, y Juana Peraza, hija de Francisco Pérez Teguisa y Beatriz Umpiérrez. (Un año después, en 1620, consta en el libro de bautismos el nacimiento de María, hija de los citados). Creemos que este Francisco puede ser el mismo personaje que aparece citado en documentos históricos en 1632 como alcaide de la fortaleza de San Cristóbal en la isla de Tenerife, isla en la que debía estar avecindado por entonces. A todas luces este matrimonio fue un consorcio entre lanzaroteños inmigrados a Gran Canaria como lo acreditan los apellidos de ambos cónyuges y los de sus padres respectivos. Pero, ¿a qué Diego Sarmiento se refieren como padre del novio: al viejo o al mozo? No lo tenemos claro y la siguiente nota que Juan Ramón ha localizado en la Carpeta del Archivo Diocesano no sabemos si aclara o complica más las cosas:
Diego Sarmiento. Dote a Juan de Pineda para casar con María Lorenzo, criada que fue de don Diego sarmiento, su padre. Año de 1610.
Nuestra impresión es que esta María Lorenzo puede ser otra hija de Juana Lorenzo, la madre de Francisco Sarmiento a quien se identifica en el protocolo como criada de Diego el viejo. Por las fechas que están en juego el padre de Francisco y María ha de ser Diego Sarmiento el viejo, quien, nacido en torno a 1535, pudo tener hijos naturales con su criada en la década de los 90 del siglo XVI cuando contaba con 60 años más o menos. En ese caso Diego el mozo estaría otorgando en 1610 la dote para casarse a su hermanastra María Lorenzo. Si pensamos que Diego nació, como veremos después, en torno a 1580 no puede ser él el padre de la novia pues esta solo tendría diez años por entonces.
Diego Sarmiento el mozo no debe a su vez ser confundido con otro Diego Sarmiento, hijo de su hermano Pedro, que en 1620 reclama para sí el reconocimiento de limpieza de sangre de sus ancestros. Este último, que, como su padre y su abuelo, también llegó a ser alguacil mayor de la Inquisición tuvo al parecer dos hijas naturales con una doncella portuguesa, como veremos en la segunda parte de este artículo.
De este modo, todo nos cuadra. La línea de Diego el mozo casada con Leonor de Quintana es la que llega hasta Faneque Hernández en el cuadro inicial. Por otro lado, la línea de su sobrino Diego, el hijo de Pedro Sarmiento y Fabiana Promontorio, daría lugar a otro linaje que conduce, en la base de la escala, hasta Juan Ramón García Torres.

Faltaría, para cerrar debidamente este asunto, encontrar una explicación al hecho de que los sobrinos venezolanos no citen en 1643 a su tío Diego ni a su descendencia cuando reivindican para sí el marquesado de Lanzarote. Un nuevo documento obtenido en la Carpeta del Archivo Diocesano por Juan Ramón García Torres resolvió, esta vez sí, todas nuestras dudas.
Don Pedro Sarmiento. Venta a Manuel Cairós vecinos de Lanzarote de un pedazo de tierra en que sembraba Pedro Sarmiento su primo que había heredado de sus padres con los demás hermanos que eran don Fernando, don Agustín, don Diego, en virtud de los documentos ante Francisco Amado, escribano público cuya venta fue ante Francisco de Higueras el 5 de septiembre de 1615.”
A pesar de ser una simple venta de tierras este protocolo tiene un interés excepcional para nosotros. Nos informa en primer lugar de que los padres de Diego el mozo (Diego Sarmiento el viejo y María de Ayala) hicieron testamento en Lanzarote ante el escribano Francisco Amado, testamento que podemos datar en consecuencia antes de1586 pues Francisco Amado, a pesar de su delación, fue secuestrado por los corsarios de Morato Arráez y penó su indignidad largo tiempo por Marruecos hasta que finalmente fue rescatado en 1617 por 6600 reales. En segundo lugar, nos dice quiénes fueron los hijos varones de dicho matrimonio y por orden de nacimiento: Pedro, que se supone que es el mayor, Fernando, Agustín y por último Diego Sarmiento el mozo. Nos dice, por último, que todos viven en esa fecha, 1615, en la que se venden las tierras. Aclaramos para general conocimiento de los investigadores que el primo sembrador es un hijo de don Francisco Sarmiento, hermanastro del marqués y hermano de Diego Sarmiento el viejo, y de su esposa Sebastiana de Sosa.
Ahora entendemos el motivo por el cual Diego el mozo no fue citado por Juan Sarmiento de Herrera, su sobrino venezolano: puesto que Diego había nacido con posterioridad a su padre, Agustín de Herrera, sus descendientes quedaban tras de él en la línea de sucesión por lo que no era necesario tenerlo en cuenta a la hora de presentar su demanda. 
 

LINAJE BOLIVARIANO
Nos basamos para confeccionar el siguiente cuadro en la monografía citada del Instituto de Genealogía de Venezuela, así como en el trabajo de José María Pinto de la Rosa:
Simón Bolívar
Datos para la historia de las casas de Herrera y Saavedra.

CONTINUIDAD DEL LINAJE
Diego Sarmiento de Ayala nace según Pinto de la Rosa en 1584 en Gran Canaria y María en 1540 en Andalucía. Buscamos el primer hito en los libros de bautismos del Sagrario Catedral y no encontramos la partida; sin embargo para nuestra sorpresa Juan Ramón García localizó en ese mismo año el registro del nacimiento (libro 5 ,folio 207) de una hermana de Diego, cuyo nombre, Isea, no deja lugar a dudas al respecto de quién fue su abuela.
“Hija de don Diego Sarmiento y de su mujer doña María de Ayala, fue bautizada en esta santa iglesia en 11 de marzo de 1584 años y fue su padrino Bernardino Lescano y doña Xironima su mujer.”
Son pues siete, y no cinco, los hijos que conocemos de dicho matrimonio. El dato además nos permite hacer deducciones acerca de la probable edad de su madre, que debía estar al final de su período fértil, (la diferencia entre Pedro, el mayor, e Isea, la menor, se aproxima a los 20 años) por lo que podemos concluir que su nacimiento debió producirse efectivamente en torno a 1540, como señala la tradición genealógica.
Diego Sarmiento el mozo se casará en Las Palmas en 1609 con Leonor de Quintana y Castrillo nacida en Guía en 1585, hija de Alonso Rodríguez Castrillo, (vecino de Guía de donde fue alcalde y distinguido capitán de una de las cinco compañías que se enfrentaron a Van der Does) y Leonor de Quintana, ambos cónyuges pertenecientes a rancios linajes que conducen hasta los conquistadores castellanos Pedro Gómez Castrillo y Juan de Quintana Soria y a sus respectivas esposas, probablemente indígenas.
A pesar de su juventud, 24 años cuando se casa, Leonor era al parecer una mujer viuda pues nos dice Pinto de la Rosa que había estado antes casada con el Capitán Lorenzo Viñol. Juan Ramón García ha localizado en el AHP la dote para su casamiento realizada por su padre Alonso Rodríguez Castrillo. En dicho documento protocolado en 1605 ante Lázaro Quesada Diego Sarmiento el mozo hace mención a que recibió de su suegro 1000 ducados: en cosas de casa (platos, espejo, mantos, etc), en “una suerte y media de tierras en un cercado que tiene arrimado a Montemayor hasta un barranquillo que parte por medio que viene de Ansofe para que plante parras…” y “en una media casa en la plaza de la villa de Guía con su balcón y cocina”. 

Autográfo de D. Diego Sarmiento de Ayala en el recibo de su dote
Hija de Leonor y Diego fue María Sarmiento de Ayala que casó en 1629 con Luis Luzardo de Franchy, hijo de los lanzaroteños Andrés Luzardo de Franchy y María Bonilla. Esta es su partida de matrimonio:
Iglesia de El Sagrario (L.P.G.C.), Libro 2 – Nº 1273 - Año 1629
"Luis Lusardo hixo de Andres Lusardo y de Maria Bonilla su lexitima muger vesinos de la Ysla de Lansarote y Doña Maria Sarmiento de Ayala hixa lexitima de D. Diego Sarmiento de Ayala y de Doña Leonor de Quintana su muger vesinos desta de Canaria fueron casados segun orden de la Santa Madre Yglesia y con liçencia del Señor Provisor en viernes veinte y nueve de Junio de 1629 años de que fueron testigos Lorenso de Viñol, Hernando de Armas y Juan Manuel con otras muchas personas por mi. El Bachiller Alonso Pacheco Solis".
Debemos suponer que el Lorenzo de Viñol citado como testigo en esa boda, a quien en este caso no se otorga el tratamiento de capitán, puede ser un hijo de Leonor de Quintana habido de su primer matrimonio, es decir que el testigo y la novia podrían ser hermanastros.
Luis Luzardo y María Sarmiento procrearon, entre otros hijos, a Diego Sarmiento Luzardo y a Leonor de Quintana, llamada como su abuela, que es nuestra ascendiente. Ambos hermanos nacen y se casan en la iglesia cumbrera de Nuestra Señora del Socorro y allí en Tejeda nacerán también sus descendientes.

DE LAS MEDIANÍAS DEL NORTE A LAS CUMBRES DE TEJEDA
¿Qué puede explicar que una familia de renombre y sobrados medios como es esta se dirija al lugar más recóndito de la isla de Gran Canaria? Ya nos hicimos la misma pregunta en anteriores artículos para intentar comprender que hacían por aquellos andurriales los Mena-Betancor, o los Canino-Ventimiglia. Ahora nos planteamos la misma cuestión con los Luzardo-Sarmiento.
Sin duda en períodos de sequía los manantiales cumbreros debieron ser un poderoso factor de atracción para los colonos en una economía basada casi enteramente en la agricultura y la ganadería. Un trabajo de Lidia Esther Romero y Pablo Máyer de la ULPGC Episodios de sequía en Gran Canaria en el siglo XVII: análisis de las rogativas…nos descubre que hubo tres momentos críticos a lo largo del siglo en la isla de Gran Canaria:
“Destacan los años 1607, 1635 y 1677 por el número de rogativas y por la intensidad del fenómeno a lo que hay que añadir que se trata de períodos extraordinariamente secos que coinciden en el tiempo con otras calamidades o catástrofes muy relacionadas con la falta de agua: la invasión de la langosta y varias epidemias (peste y viruela)”.
Presumimos que el traslado a la cumbre de nuestra familia de hacendados Luzardo-Sarmiento pudo producirse a mediados de siglo, después de 1637, año de sequía extrema que culmina con una terrible plaga de langosta. Podría pensarse que la caldera de Tejeda por sus nacientes de agua y por su altitud, rodeada de barreras montañosas que superan los 1500 metros sería el lugar apropiado para enfrentarse a la adversidad climática generada por la masiva deforestación de la isla y el azote de las plagas. Es solo una conjetura que, como tal, ahí queda.
Leonor de Quintana nació efectivamente en Tejeda en 1646 y allí se casa en 1667 con el vecino de Guía Alonso Gómez Castrillo, hijo de Alonso Gómez de Vega y Jacinta González del Río, procreando, entre otros hijos, a Jacinta de Quintana y a Salvador Sarmiento de Quintana, nacido también en Tejeda, por quien sigue la línea.

RETORNO A GUÍA DE GRAN CANARIA
Con Salvador se produce el retorno a la Villa de Guía, al casarse nuestro ascendiente con la vecina de esta localidad Juana Perera Felipe, hija de Andrés Perera y Jerónima Felipe. Con ella tuvo, entre otros hijos, a José de Quintana y a otro Salvador Sarmiento, por quien sigue la línea, que casa en 1732 con María Guerra, hija de Juan González e Isabel Guerra.
Hijas de Salvador y María fueron, que tengamos presente, Catalina Sarmiento, casada con Francisco Bautista Almeida (línea que también conduce hasta el autor) y María Encarnación Sarmiento, casada con José Betancor Guerra.
Sobre este José Betancor les diremos, como curiosidad, que es hermano de Ana Betancor Guerra y ambos son hijos de Fabián Betancor y de Lucía Guerra, nietos de Juan Betancor Jerez y María Mendaña y bisnietos de Luis de León Cáceres y Catalina de Barrios, protagonistas del artículo anterior al que pusimos por título: Ascendencia lanzaroteña de apellidos León y Betancor. Se confirma de este modo la conexión lanzaroteña de Teguise con Guía de Gran Canaria.
Hija de José y María, por quien sigue la línea es Ana Betancor Sarmiento casada con José Antonio Quintana Padrón, hijo de Ángel de Quintana y Tomasa Padrón, quienes procrearon a María de Quintana Betancor.
María casa en 1819 con mi retatarabuelo, así hablamos los canarios aunque a la RAE no le guste, Francisco Bautista Rivero cuyo testamento en Guía ante Miguel Calderín en el año 1849 nos precisa su descendencia. Con la lectura de la cláusula de dicho testamento de mayor interés genealógico vamos a concluir la primera parte de este artículo:
“Declaro haber sido legítimamente casado y velado según lo dispone nuestra Santa Madre Yglesia con Dª María de la Encarnación Quintana, natural de esta Villa, en cuyo matrimonio hemos procreado por nuestros hijos legítimos a D. Francisco que es casado con Dª Andrea Miranda, Dª Úrsula, D. Anselmo que también es casado con Dª María Encarnación Gordillo, Dª Ana, Dª Lorenza, D. Domingo y Dª Josefa que en estado de soltera conservo en mi compañía y lo declaro para que conste”.

NOTA
La segunda parte versará sobre la descendencia de Diego Sarmiento el viejo a través de su hijo mayor, el también alguacil mayor de la Inquisición, Pedro Sarmiento de Ayala, para llegar 12 generaciones después, en la base del nuevo cuadro que les presentaremos, hasta Juan Ramón García Torres, mi extraordinario colaborador. De este modo Juan Ramón resulta ser mi primo en duodécima generación, o dicho de otra forma, Diego y María de Ayala son nuestros duodécimos abuelos. No crean que esto es algo extraordinario: todos los canarios somos parientes en más o menos generaciones. Las islas son así de chicas y la Historia de este pueblo es así de grandiosa.

 

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