miércoles, 8 de agosto de 2018

MOLINA EN CANARIAS. PREDECESORES DEL LINAJE MOLINA QUESADA EN TENERIFE Y GRAN CANARIA

EUGENIO EGEA MOLINA  orcid.org/0000-0002-9433-6298 
CRISTINA LÓPEZ-TREJO DÍAZ orcid.org/0000-0003-4409-9260
FRANCISCO ALEMÁN GONZÁLEZ


1. INTRODUCCIÓN

Las presentes notas son fruto del hallazgo de nuevos datos encontrados a través de la continuación de las pesquisas genealógicas que van aumentando el conocimiento. En este caso, sobre la línea Molina Quesada que legó el apellido Molina a sus descendientes en Canarias desde su establecimiento hace más de cuatro siglos y medio, con unas dieciocho generaciones hasta la actualidad. De esta manera, hemos complementado con estas aportaciones algunos aspectos que completan anteriores escritos que hemos publicado; centrándonos en los precursores que han dejado su descendencia en Canarias, y particularmente en Tenerife y Gran Canaria, llenando algunas lagunas sobre Juan de Molina Quesada y su hijo Diego de Molina Quesada [1].

Y es que la genealogía, como área del conocimiento humano, se va desarrollando a la luz de nuevos hallazgos, verificando o desechando hipótesis, mediante la investigación que da objetividad y rigor científico. Siendo imprescindible la contrastación mediante la alusión a las fuentes utilizadas, es decir convertirse en público, contrastable y verificable. Aspecto que en la genealogía histórica carecía de importancia, y en la que prevalecían los criterios de autoridad y tradición; razones por las que aún nos quedan muchos mitos por desenterrar, porque si hay algo que consideramos es que la realidad es más enriquecedora y supera a la ficción.

En esta dirección, la revisión y la adición de datos disipan algunas sombras para resolver algunos interrogantes sobre el comienzo de esta familia en las islas. A partir de aquí, no hay que obviar la aparición de otras preguntas, un reto constante que engrandece la ciencia.

Volviendo a la familia Molina-Quesada en Canarias es destacada por Francisco Fernández de Bethencourt, nuestro genealogista universal y precursor de la genealogía moderna, del que en estos días, el 27 de julio, se cumplió 168 años de su nacimiento en Arrecife de Lanzarote, y que podría ser una fecha a institucionalizar y conmemorar anualmente como “Día de la Genealogía Canaria”-, en su magna obra Nobiliario y Blasón de Canarias, publicado en 1878, en su tomo II (p 191-250),y posteriormente en la ampliación y actualización del mismo por una Junta de Especialistas, aparecido como Nobiliario de Canarias, coordinada por el prof. Juan Régulo, en su tomo I editado en el año 1952 (p 545-606).

Úbeda
En ambas obras se refiere como una ilustre ascendencia, originaria del señorío Molina de Aragón (Guadalajara), cuyo primer Señor fue Manrique de Lara, de los condes de Castilla, cuya descendencia indistintamente tomó los apellidos Manrique de Lara y de Molina. Actualmente, el título del señorío de Molina está en posesión de la monarquía española. En época de la reconquista, uno de sus descendientes, Pedro González de Molina, sirvió al rey Fernando en la conquista de Úbeda y Baeza, constando en los heredamientos. Se trata de los Molina de Úbeda, de la que provienen los Molina Quesada estableciéndose en Canarias  dos de sus ramas:

- La de Molina Quesada fundada por Juan de Molina Quesada, de quién trataremos. En la que hasta ahora, únicamente se ha considerado su descendencia en Tenerife -de hecho, Fernández Bethencourt (1878) utiliza el título Casa Molina Quesada de Tenerife-  y de la que poco se ha mencionado la que su hijo Diego ha dejado en Gran Canaria.

Escudo Molina de Aragón
- La de los Marqueses de Villafuerte, por ser esta una de su descendencia, que partió del capitán Francisco de Molina, sobrino del nombrado Juan de Molina Quesada [2].

Para ilustrar la distribución actual de las personas apellidadas Molina, no todas con el mismo origen familiar, de acuerdo al padrón del INE de 2017, existen 244.885 personas apellidadas Molina, de las que 7.306 residen en Canarias, es decir un 2,9%. En las islas, son vecinos de la provincia de Las Palmas 4.130, un 56,5% de Canarias, y en la provincia de Sta. Cruz de Tenerife 3.176, lo representa el 43,5% [3].

Centrándonos en Gran Canaria, habitan mayoritariamente en la zona noroeste de las localidades de Guía y Gáldar, así como en Las Palmas de Gran Canaria pero con orígenes en la citada zona, descendientes de Diego de Molina Quesada.

A continuación dejamos unos retazos biográficos y genealógicos de Juan de Molina Quesada, pionero de su linaje en Canarias, y de uno de sus hijos, Diego de Molina Quesada que dejó su descendencia en Gran Canaria. Esto, acompañado de algunas de sus circunstancias, tiempo y espacio, de personas en su entorno familiar, económico y social, de forma personal e identificada con sus nombres propios, presentando novedosos datos que han podido extraerse de documentos y bibliografía


[1] Egea Molina, E. (2012a, 2012b, 2013a y 2013b).
[2] Fernández Bethencourt, F. (1878 y 1952).
[3] Instituto Nacional de Estadística: Padrón de 2017, publicado el 19 junio 2018 y visto 16 julio 2018.



2. JUAN MOLINA QUESADA PIONERO DE SU LINAJE EN CANARIAS

A mitad de 1500, Las Palmas, o también llamada como Ciudad de Canaria, nacida al abrigo del barranco Guiniguada, de aquel embrión de 1478, cuando los castellanos patrocinados por sus majestades católicas fundaron el Real de Las Tres Palmas. Una incipiente urbe que se fue conformando en torno a Vegueta, donde se iban construyendo las casas principales. En este desarrollo inicial se le va dotando de una nueva administración civil, militar y religiosa a semejanza con las del reino de Castilla,
contando con Cabildo compuesto por regidores para el gobierno de la isla, la Real Audiencia de Canarias para dirimir litigios judiciales, Tribunal del  Santo Oficio con jurisdicción en toda Canarias para los asuntos de los dogmas de fe y persecución de la herejía, su Catedral como sede episcopal del archipiélago con su cabildo eclesiástico, y un capitán general que comandaba las milicias de la isla;  además de tres conventos masculinos: franciscanos, dominicos y agustinos. Un ensayo sobre el terreno de ultramar para exportar a las Indias de Su Majestad.

Una ciudad portuaria de frontera, cosmopolita, con trasiego de personas y mercancías, generadora de una sociedad con gente de distintas procedencias que se van asentando en la isla, así otras que van de paso hacia América, abierto por nuevos descubrimientos en la navegación y la perspectiva de nuevas tierras a través del océano atlántico. En fin, una ciudad originada por una sociedad que ofrecía múltiples posibilidades.

Una fructífera industria que se sustentaba en los ingenios azucareros, y todo lo que ello conllevaba plantaciones de cañadulce, transporte y manejo industrial, cuyo producto, verdadero “oro blanco”, surtía los lejanos puertos europeos, con un intercambio por productos manufacturados, así como el lucrativo negocio de la esclavitud humana para su explotación. 

En este contexto, llega a Gran Canaria, el mercader Juan Molina Quesada, primero como estante, alrededor de 1557 cuando contaba unos 23 años [4], y luego como vecino, a partir de la década siguiente, tras su casamiento con la flamenca Cornelia Franzaces, natural de Amberes hija de los distinguidos Cornelio Franzaces y su esposa María
Burthins, nacidos en Brujas [5].

Juan Molina Quesada fue natural de Jaén, concretamente de Úbeda,  siendo sus progenitores Francisco Cazorla Quesada y Guiomar Mayor de Molina,  precursores del linaje Molina-Quesada afincado en las islas. Ambos procrearon a [6]:

- Alonso Quesada, llamado como su abuelo paterno, quien casó con Francisca Gutiérrez.

- Rodrigo Quesada Molina quien matrimonió con Bernardina Cueva Mendoza, con posteridad en Úbeda.

- Luis Quesada casado con Clara Ayala, que residió en Flandes y Canarias, de los que hubo descendencia.

- Diego Molina Quesada casado con Inés Godoy.

- Cristóbal Molina Quesada, sirvió en los tercios de Flandes, donde murió joven y soltero.

- Bernardo Molina, participó en las mismas guerras, falleciendo en Soria.

- Juan Molina Quesada, del que estamos tratando.

- Teresa Molina Quesada, erróneamente en el Nobiliario se menciona como mujer del primer duque de Alburqueque y valido del rey, Beltrán de la Cueva.

- Constanza Molina Quesada que con su marido Alonso López de las Doblas, se convirtieron en los antecesores de la segunda rama Molina Quesada en Canarias, por su hijo el capitán Francisco de Molina.
Desde joven Juan de Molina Quesada había compartido destinos y participado en los negocios con su hermano Luis Quesada, su mentor y protector, hombre de mundo que había estado en Inglaterra, Italia y las provincias de los Países Bajos. Ambos convivieron en Flandes, adentrándose en las mañas de los negocios y del comercio.

De esta manera, Juan de Molina en los años 1557 y 1558 actuó como agente comercial de Francisco Palencia y de su hermano Luis Quesada, avecindado en Amberes, enviando azúcar desde Gran Canaria [7]. Asimismo, de su actividad queda constancia en un poder que le otorgó  Alonso Rodríguez para cobrar una deuda en Tenerife a Francisco Pérez de Hoyos [8].

En esta actividad, los hermanos Quesada Molina fueron agentes en la isla de Hernando de Quintanadueñas, oriundo de Burgos, quien en varias ocasiones recibió azúcar en Ruán. Además, el exhaustivo inventario del burgalés Antonio de Castro fue realizado por su albacea Juan de Molina[9].

En 1563, su hermano Luis, casado con Clara de Ayala, se radicó en Las Palmas, donde además  ejerció como docente de jóvenes, convirtiéndose en uno de los primeros maestros que tuvo la isla [10].

Antes de la llegada a Gran Canaria de los hermanos Luis y Juan, algunos familiares estaban establecidos y posicionados en la sociedad isleña, lo que favoreció su arribada y rápida integración, formando un núcleo familiar potente. Sus tíos paternos:

- El escribano público y regidor de la isla Gil de Quesada que matrimonió con Inés Vergara Suárez Carreño, hija del extremeño Cristóbal de Vergara y de la canaria, oriunda de la localidad sevillana de Sanlúcar de Albaida, Catalina Suárez Carreño. Siendo los progenitores de la ilustre casa Viñol-Vergara, luego refundida en la de Manrique de Lara [11].

- Luis de Quesada matrimoniado en Las Palmas con Inés Herrera Contreras [12].

Y sus primos hermanos, hijos de su tía paterna Mariana Alonso Quesada y de su marido Juan Gutiérrez de Balboa:

- Luis de Balboa que estuvo enlazado con Tomasina Calderín, hija del importante mercader y propietario genovés Teodoro Calderín y de Leonor Tamariz, natural de Carmona [13].

- Rodrigo de Balboa quien casó con Úrsula de Troya, hija de Antonio Rosales, de ascendencia judía,  y de Cecilia de Troya, nieta del canónigo y primer párroco de Teror Juan de Troya y la mestiza Antonia Ramírez. De este matrimonio,  fue hijo Silvestre de Balboa, nacido en Gran Canaria en 1563, primer autor de las letras cubanas [14].

A los pocos años del establecimiento de su hermano Luis Quesada, se avecindó Juan de Molina Quesada que llegó después de celebrar nupcias en Amberes con Cornelia Franzaces, quien le acompañó para constituir su hogar.

Los dos hermanos, Luis y Juan, además compartieron parentesco político pues fueron concuños: sus respectivas mujeres Clara Ayala y Constanza Franzaces eran hermanas de madre: Clara Ayala, cónyuge de Luis Quesada, hija del burgalés Diego Ayala y María Burthins y, por su parte, Cornelia Franzaces, matrimoniada con Juan de Molina Quesada, hija de Cornelio Franzaces y María Burthins; esta había contraído matrimonio dos veces, primero con Diego Ayala y al enviudar con Cornelio Franzaces [15].
En este tiempo, la familia de Juan Molina y Cornelia Franzaces iba acrecentándose a medida que nacían sus vástagos [16]:

- Juan de Molina Quesada. Las Palmas, 1569. Renuncia a la primogenitura al incorporarse a la orden jesuita.

- Guiomar de Molina Quesada. Las Palmas, 1572. Casó con el regidor de Tenerife Juan Mateo Negrón, descendiente del genovés Mateo Viña, financiador y conquistador de Tenerife.

- Luis Quesada. Las Palmas, 1575. Murió de niño.

- Francisco de Molina Quesada. Las Palmas, 1578. Regidor de Tenerife y su alcaide principal; matrimoniado con Francisca Ibáñez de Azoca, hija del regidor y escribano mayor de la isla Simón Azoca y de Ana de Vargas.

- Rodrigo de Molina Quesada. Las Palmas, 1580. Doctor en Teología, canónigo de la catedral de Orense. Eminente escritor, Agustín Millares Carló lo recoge en su obra sobre canarios ilustres.

- Tomás de Molina Quesada. Las Palmas, 1580. Doctor en Teología y canónigo de la catedral de Segovia.

- Pedro de Molina Quesada. Las Palmas, 1584. Religioso mercedario, desarrolló estudios de historia sobre Canarias y su orden. Tiene su lugar destacado en la Historia de Canarias de Viera y Clavijo y en la bibliografía de Agustín Millares Carló.

- Luis Quesada. Las Palmas, 1585.

De este modo, el matrimonio tuvo la mayoría de sus hijos en Las Palmas antes de trasladarse a Tenerife, a excepción de su hija María de Molina que lo hizo en Garachico, donde quedaron los que casaron que lo hicieron con las más destacadas familias de la isla, de la que descenderá gran parte de la aristocracia canaria.

Hemos de apuntar que los hijos varones escogieron la profesión religiosa, incluso el mayor al que hubiera correspondido el mayorazgo, quedando este para Francisco de Molina, segundo en la fratria. A lo que se añade, la repetición de los nombres familiares.

Su ascenso económico y social se ve colmado con su nombramiento de regidor de Gran Canaria en el año 1580. Siete años después, estando fuera de la isla, fue sustituído por Juan Cortés de los Ríos [17].

Por esos años, la crisis del azúcar va alcanzando el irremediable abandono de su producción que gráficamente lo podemos ilustrar con los siguientes datos: en 1515 se contabilizaban en la isla 25 ingenios, en 1556 se redujeron a 12, y ya en 1590 solo se mantenían 7, denotando una caída espectacular del “oro blanco” [18]

En mitad de la década de 1580, Garachico se convierte en una localidad pujante impulsada por su puerto, el principal de la isla, y la producción-comercio vinícola, que se tradujo en un importante trasiego comercial. 
Su localización era
envidiable, contaba con cañaverales, viñedos y agua, así como caletas para la construcción de naves, por lo que en 1585 llegó a contar con 520 familias, unos 3170 habitantes. 

El cultivo de vino en la comarca favoreció el tráfico hacia Europa y América, convirtiéndose en motor económico [19].

En estos años, el ingeniero cremonés Leonardo Torriani, a tenor de su visita al lugar, lo expresaba de esta manera: “Aunque esta villa y puerto no tenga más de 400 casas, es la más rica y de mayor comercio de todos los lugares y ciudades de estas islas...”[20].

Ante la desoladora situación que ofrecía Gran Canaria, Garachico en Tenerife  incluía nuevas y mejores circunstancias, por lo que Juan Molina Quesada se decantó por cambiar y allí se trasladó estableciendo su domicilio familiar.

La última hija de este matrimonio nació en Garachico:

- María de Molina Quesada, nacida en 1587 y bautizada en la parroquia de Sta. Ana. Se impuso carta dotal, cuando contaba 12 años, para casar con el alférez mayor y regidor de Tenerife Francisco Valcárcel Ponte (primo hermano de la mujer de su primo Francisco -Isabel Benítez de Lugo Valcárcel-) [21], hijo del también alférez mayor de su mismo nombre y de Isabel Ponte de las Cuevas, de los Señores de Adeje.

Siguió con sus actividades comerciales con vínculos familiares estrechos, allí se lleva a su sobrino Francisco de Molina, natural de Baeza, hijo de su hermana Constanza de Molina Quesada y de su marido Alonso López de las Doblas. Este Francisco de Molina accedió al cargo de capitán, casó en La Orotava en 1593 con Isabel Benítez de Lugo Valcárcel (su primo el alférez mayor Francisco Valcárcel Ponte Lugo casó con la prima de Francisco Molina, María Molina Quesada), hija del maestre de campo Francisco Benítez de Lugo y de María Magdalena Valcárcel, de nobles familias. El matrimonio es el iniciador la segunda rama de Molina Quesada en Canarias, tronco de los marqueses de Villafuerte.

En esta relación de parentesco y comercial, en el año 1592 data un poder de su sobrino Guillén de Ayala, regidor de Gran Canaria, para representarle en sus negocios. El dicho Guillén era hijo de su hermano Luis Quesada y de Clara de Ayala, [22].

Además se hizo con hacienda y tierras que aumentaron
Garachico. Puerta de la Tierra
considerablemente su patrimonio, a lo que se añade su plena integración en la clase dominante insular.

En 1593, ante el escribano público de Garachico Álvaro Quiñones, Cornelia Franzaces dictó sus últimas disposiciones, donde hacía constar su voluntad de ser enterrada en la parroquial de Santa Ana en Garachico, en sepultura de propiedad [23]. En esa fecha, ocurre su desceso.

Unos años después, Juan de Molina Quesada posiblemente volvió a contraer nupcias con Beatriz Núñez, madre de Diego Molina Quesada, de lo que escribimos más adelante.

Una de las fechas luctuosas de la historia garachiquense fue la de agosto de 1601, dos navíos procedentes de Sevilla trajeron consigo uno de los temibles males de la época: la peste bubónica. Esta epidemia mortal se expandió rápida y fulminantemente, dejando a su paso la desolación y la muerte de un gran número de personas. Entre estas, la de Juan de Molina Quesada [24].

Así, el fundador de la familia Molina Quesada en Canarias, desde su nacimiento en Úbeda, tempranamente estuvo marcado por el comercio, donde los vínculos familiares se estrechaban con los económicos y sociales, lo que determinó su trayecto vital en escenarios portuarios: Amberes, Las Palmas y Garachico.


[4] Años 1575-1576. Documento relativos a Juan de Molina, mercader, y Francisco de Molina, alguacil mayor del cabildo de Gran Canaria, ambos vecinos de Las Palmas. En declaraciones ante Diego Flores de San Juan, notario apostólico, sobre un suceso en el puerto de las Isletas entre el gobernador Diego de Melgarejo y el fiscal del santo oficio José de Armas. Juan, mercader, dice contar 41 años (nac. apr. 1534) y Francisco, alguacil del cabildo de Gran Canaria, 50 años, ambos vecinos de Las Palmas.
[5] Fernández Bethencourt, F. (1952) tomo I p 622. Cornelia Franzaces fue hermana de Susana Franzaces casó en Amberes con Diego Alonso de Saa, natural de Burgos donde fue regidor, en cuya ciudad tuvieron una ilustre descendencia.
[6] Op cit tomo I p 560.
[7] Lobo Cabrera, M. (1982) p 61.
[8] Pérez Herrero, E. (1994) p 171.
[9] Lobo Cabrera (1990) p 497.
[10] AHPLP escribano público Alonso de Balboa f 365 vto.  cit. Lobo Cabrera, M. (1980) p 21.
[11] Fernández Bethencourt, F. (1952) tomo 1 p 419 y 555. AA: legajo Viñol.
[12] Op cit tomo I p 556.
[13] Op cit tomo II p 30 y 175. AA: legajo Molina.
[14] Arencibia Rodríguez, L. (2013). García-Correa Gómez, L. y Rodríguez de Castro, R. (2014) p 104, donde puede leerse: “El hecho de ser Antonio de Rosales descendiente de judíos le hace comparecer en 1525 ante el inquisidor de la isla para declarar su genealogía. También lo hace su mujer (Cecilia de Troya), de la que se dice que su padre es de familia cristiana vieja (familia Troya) por lo que no se entraba más a indagar , mientras que por su madre (Antonia Ramírez, hija del sevillano Diego Ramírez y de mujer indígena) se la tenía como descendiente de los naturales de la isla  (A. El Museo Canario: signatura CLII-1)”.
[15] AA: legajo Ayala. Núñez de la Peña: árbol nº 59.
[16] Los bautizos de los hijos de Juan Molina Quesada y Cornelia Franzaces nacidos en Gran Canaria aparecen registrados en la Parroquia del Sagrario Catedral (AHDC). Fernández Bethencourt tomo I p 560, en el mismo se omite a Luis Quesada. Núñez de la Peña, árbol nº 59.
[17] En 1580, en la inscripción de bautismo de su hijo Rodrigo se le anotó como regidor (AHDC: P. El Sagrario; Fernández Bethencourt, tomo 1 p 560). El 7 de septiembre de 1587, se recibió como regidor de Gran Canaria a Juan Cortés de los Rios, en sustitución de Juan de Molina Quesada (AA: legajo Cortés).
[18] VVAA (2006).
[19] Barrera Delgado, M.D. (2014).
[20] Torriani L. (1592:1959) p 193.
[21] Nietos del ldo. Cristóbal Valcárcel, natural de Extremadura, gobernador y justicia mayor de Tenerife y La Palma que fue favorecido por el adelantado Alonso Fernández de Lugo con numerosas e importantes datas, cónyuge de Isabel de Lugo Bahamonte, sobrina del adelantado, conocida por la Ricahembra por sus cuantiosos bienes y posesiones, heredera universal de sus padres: el regidor Pedro de Lugo y Elvira Díaz.
[22]  AZC: 400_10 fol 36 vto. AA: legajo Ayala.
[23] AHPSCT: PN 2247 fol.  169-172 vto.
[24] Se recoge en una anotación del AZC400_10 fol. 56: “Juan de Molina codicilo fol. 439: testó ante Melchor Pérez de Fonseca: este día 10 de agosto (1601) dice Quiñones que salió de Garachico a su hacienda de Daute por la enfermedad de contagio y que fue el último que salió”. Asimismo, con anterioridad, en ese mismo año, aparece otro instrumento del escribano público Álvaro de Quiñones (fol. 131) referido a unas tierras suyas  en La Caleta  a tributo a  Antonio Viera (AZC 400_10 fol. 54 vto.). Previamente, Juan de Molina había dispuesto dos testamentos, ante Pedro Belmonte el 4 de marzo de 1594 y Salvador Pérez Guzmán en 23 de diciembre de 1594.




3. DIEGO MOLINA QUESADA, EL HIJO ENCONTRADO. ANTECESOR DE SU FAMILIA EN GRAN CANARIA

En su día, escribimos sobre Diego Molina de Quesada, del que se tenía referencia pero se desconocía su filiación, aspecto que tratamos en un anterior trabajo de 2013 [25]. El hallazgo de la partida de su primer  casamiento con Isabel Hernández, nos ha despejado un interrogante, al ser mencionados sus progenitores, con lo que podemos determinar a los mismos [26].

De esto pudiera presuponerse que su padre Juan Molina Quesada pudo tener otro matrimonio, después de enviudar de su primera mujer Constanza Franzaces,  fallecida en 1593.

Asimismo, promediando entre las fechas de los óbitos de ambos, de Cornelia Franzaces y de Juan de Molina, 1593 y 1601 respectivamente, Diego Molina pudiera haber nacido alrededor de 1597. Además, tenemos conocimiento de Ana  Molina Quesada que se avecindó en El Sauzal, casada con Mateo Gutiérrez, y que murió en 1626, sin dejar descendencia [27]. La dicha pudo ser también hija de Juan de Molina y de Beatriz Núñez, y por tanto hermana entera de Diego.

En el año 1627, Diego Molina, hijo de Juan de Molina Quesada y Beatriz Núñez, vecinos de Garachico, con pocos recursos económicos pero con un importante aval social, casó en la iglesia de Santa Úrsula con Isabel Hernández, viuda de Pedro García de Calzadilla [28].

El consorcio entre Isabel Hernández y Pedro García, su primer marido, se celebró en el año 1611, en la Victoria de Acentejo [29]. Los padres de Isabel Hernández fueron Juan Fernández e Inés Pérez, vecinos de Acentejo; ella tomó el nombre, y por consiguiente el apellido, de su abuela materna matrimoniada con Alejo Pérez [30].

De la alianza entre Isabel Hernández y su primer marido Pedro García de Calzadilla quedaron cuatro hijos; menores al casar Isabel con Diego de Molina, estos fueron [31]:

- Pedro García Calzadilla

- Francisco García Calzadilla, dos veces casado: primero con Dionisia Pérez y, viudo, en el año 1685, con María Francisca hija de Juan Blas y Catalina Lorenzo, de La Orotava [32]                              .

- María de Molina contrajo nupcias con Juan de Góngora, vecino de Guía [33].

- Susana de Molina.
Por su parte, Pedro García de Calzadilla era descendiente de Alonso García de Albújar, natural de Calzadilla (Cáceres), primero de esta Casa en Tenerife, concretamente en La Orotava, instalado en los primeros años de 1500, casado con Leonor Martín del Cabo, fundadores de la estirpe Calzadilla (García de Calzadilla y Molina -Calzadilla-). Así podemos observar que sus hijos llevan los apellidos familiares: los varones García y las hembras Molina, sin tener relación de parentesco con los Molina Quesada.

El consorcio con Diego Molina duró once años, avecindándose en Guía (Gran Canaria), con su mujer Isabel Hernández y los hijos de esta, sin alcanzar posteridad.

El mismo año de la muerte de Isabel Hernández, en 1638, se inscribió la dote  de María Castrillo proporcionada por su madre Jerónima Pérez o Castrillo [34], viuda de Lucas Díaz que dispuso sus últimas voluntades en 1634 [35], para contraer matrimonio con Diego. María por aquel entonces contaba con dieciséis años [36] mientras que su marido podría haber estrenado la cuarentena. El año previo, 1637, María Castrillo había sido dotada por su madre para celebrar nupcias con Juan Afonso, hijo de Pedro Aguiar y de Juana Henríquez [37]. Por supuesto, estas últimas no tuvieron lugar; la preferencia se inclinó por el estatus social de alguien de familia con lustre y emparentada con lo más granado de nobleza tinerfeña, e hijo, hermano de regidor y destacados miembros de la iglesia.

La firma de Diego Molina de Quesada nos corrobora su pertenencia social privilegiada y minoritaria, puesto que un pequeño número de personas sabían escribir; a lo que se suma la constatación de su lustrosa prosapia: Molina Quesada.

De María Castrillo, nacida en Guía en 1622, fueron sus padres Lucas Díaz y Jerónima -llamada como su abuela materna- que matrimoniaron en el citado lugar el 25 de octubre de 1621 [38]. Siendo sus abuelos paternos: Juan Díaz de la Rosa e Isabel Acosta, y sus abuelos maternos: Martín López y María Castrillo (de la que tomó su onomástica).

El matrimonio entre María Castrillo y Diego Molina transcurrió durante unos veinte años, residiendo en la calle
que va a la ermita de San Roque, llamada después de Enmedio y actualmente de Pérez Galdós dónde se encuentra la ermita de S. Antonio, recibida en dote de su mujer [39].

Esta fue su sucesión [40]:

- Ana de Molina, nacida en 1640, casada con Diego Díaz.

- Lucas de Molina, natalicio en 1642.

- Francisco de Molina en 1644 inició su vida, matrimoniado dos veces: primero con Inés Díaz Moreno y, después con  Ana Aguiar.

- Jerónima de Molina o Castrillo, nacida en 1647 y desposada con Gonzalo Báez.

- Diego de Molina cuyo natalicio tuvo lugar en 1649.

- Cornelia de Molina nacida en 1652, cónyuge de Manuel Almeida.

- María de Molina o Castrillo, nacida en 1655, casó con Juan Suárez.

- Juan de Molina que nació en 1659, matrimoniado con Sebastiana Ramos Jiménez.

Unos meses después del nacimiento de su último hijo, en noviembre de 1659, Diego Molina que podía contar 67 años, dispuso un documento notarial ante el escribano público Mateo Álvarez de Escobar [41]. Fecha que estaría cercana al final de su vida.

De su descendencia damos cuenta  en los siguientes enlaces:





[25] Egea Molina, E. (2013b).
[26] Alemán, F. López-Trejo, C. y Egea, E. (2018), en este trabajo mostramos previamente la filiación completa de Diego Molina-Quesada.
[27] AHDSCLL: Pª El Sauzal, Libro de Mandas.
[28] AHPDCLL: Pª Santa Úrsula, Libro 1 de casamientos fol 13 (también puede consultarse en Oliva López, S. 2018 p 49). “Diego Molina Quesada hijo de Juan Molina Quesada y de Beatriz Núñez, vecinos de Garachico e Isabel Hernández viuda, vecina de Sta. Úrsula. Padrinos: Francisco García y Cecilia Afonso, vecinos del lugar, testigos: Simón Martín presbítero y Juan Hernández vecinos” (agradecimiento a David Corbella Guadalupe, archivero del AHDSCLL). Los testigos son deudos cercanos de Pedro García Calzadilla, marido fallecido de Isabel Hernández, hijo de Juan García y Cecilia Afonso, posiblemente su hermano y madre. Esto sugiere un interés y apoyo en este casamiento por parte de la familia política de la contrayente.
[29] AHDSCLL: Pª La Victoria de Acentejo, libro 1 de casamientos fol 25 vto.
[30] Oliva López, S. (2018) p 49. Pérez Santos, J. y Casas López, J.M. (edic 2014) tomo 2 vol 3 p 281 nº 1059.
[31] Estos datos están extraídos del testamento de Isabel Hernández, en la escribanía de Juan Leal Camacho en 2 de febrero de 1538. Custodiado en el AHPLP, siendo imposible consultar por su deterioro. Se han recogido algunas notas extractadas en el AA legajo Molina y AHDC: Índice de Escrituras y Protocolos fol. 55 vto. nº 68.
[32] Matrícula del casamiento de Francisco García Calzadilla y su segunda mujer María Francisca en 2 de diciembre de 1685 (AHDSCLL: Pª La Concepción de La Orotava, libro 4 fol 79 vto.).
[33] APG: libro 2 bautismos, están inscritos sus hijos Bartolomé (1643) y Ana (1657). Los libros sacramentales de la parroquia guíense, actualmente se pueden consultar en el AHDC.
[34] AHDC. Índices de escrituras de protocolos, fol 50 vto. nº 143. Ante el fedatario público Juan Leal Camacho, documento deteriorado y fuera de consulta en AHPLP.
[35] AHDC: Índices de escrituras de protocolos, fol 76 vto. nº 77.
[36] María Castrillo se bautizó el 19 de julio de 1522 (APG: libro 1 bautismos; González-Sosa, 2007 p 232).
[37] AHDC. Índices de escrituras de protocolos, fol 50 vto. nº 142.
[38] APG: libro 1 de casamientos fol 196; puede consultarse en González-Sosa, P 1985 p 83.
[39] Traslado de Diego Álvarez de Silva, fedatario de Las Palmas, de una escritura que Diego de Molina Quesada, vecino de la villa de Guía, otorgó el 4 de diciembre de 1651 (AHPLP, nº 1269 folio 318)  haciendo imposición de un censo perpetuo que gravara ciertos bienes propios a favor del capitán Francisco de Padilla, regidor de Gran Canaria, siendo testigos del actuado, Cristóbal de Francisco, Jerónimo de la Oliva y Salvador Rodríguez, vecinos de la ciudad citada (copia de 2 de noviembre de 1667). Firma Diego de Molina Quesada (AHPLP).
Mal estado y difícil transcripción: ...”sobre unas casas altas sobradadas propias que lindan con la calle que va a San Roque y con casas de Jerónima Pérez, mi suegra, y debajo las casas de Pedro de Herrera. Cuatro horas de agua que dicen de Las Palmas, una suerte de tierras de dos fanegadas, calle arriba por un lado del barranquillo de Montero (¿)”.
Años más tarde, en 1739, su hija Jerónima menciona su domicilio en la C. de En medio que se dirige a la ermita de S. Roque, junto a la recién construida ermita de S. Antonio, ante Juan Ruiz Miranda (AHPLP. PN f 219 vto-221 vto.).
[40] APG: libro 2 de bautismos.
[41] AHDC. Índice de Protocolos: Noticias de Testamentos, fol 24 vto.



4. APRECIACIONES FINALES

No queremos concluir la presente comunicación sin poner en valor una serie de apreciaciones que a nuestro gusto son de vital importancia para entender la genealogía fuera de linajes y enlaces.

Lejos de lo que pudiera parecer, el linaje Molina Quesada en este artículo retratado, no es más que un fiel reflejo de la actividad humana y de los deseos del Hombre en buscar el progreso y la ascensión social.  Tras otear y revisar cada uno de las situaciones descritas, nuestro lector se podrá dar cuenta de cómo en este linaje existió desde el principio dos líneas que marcaron el devenir de sus miembros.

Por un lado, nos encontramos con una familia viajera, producto de su tiempo, que lo mismo se asientan en Úbeda que en Flandes, en El Real de Las Palmas o Italia, lo que denota que el comercio y poder económico primó en los planes del clan. El arraigo al lugar pasa a un segundo plano cuando los negocios hablan.

Por otro lado, y estrechamente   unido al anterior, hallamos una familia que busca la promoción social, apoyados en el comercio y en una escogida política de enlaces matrimoniales muy ventajosos para ellos siendo el mejor exponente  el gran desconocido  hasta hoy, don Diego de Molina,  que sin participar de la actividad política o económica de la familia enlazó con mujeres de la oligarquía local consiguiendo incrementar el patrimonio a la vez que  introducía  su estirpe en Gran Canaria  con su numerosa prole.

Desde la feliz complacencia de haber dado respuesta y origen a uno de los linajes más enigmáticos y atrayentes de las islas, queremos desear que este artículo reactive tantas y tantas genealogías que se han visto interrumpidas por falta de respuestas.


Post-escrito (19 mayo 2021):

Linaje Guanarteme en una rama Molina en Gran Canaria

FUENTES

Archivos:

- Archivo Acialcázar (AA): legajo Molina

- Archivo Histórico Diocesano de Canarias (AHDC)

Parroquia de El Sagrario: libros sacramentales.

- Archivo Histórico Diocesano de S. Cristóbal de La Laguna (AHDSCLL)

Parroquia de Sta. Úrsula, Parroquia de la Concepción de La Orotava, Parroquia de La Victoria de Acentejo: libros sacramentales.

- Archivo Histórico Provincial de Las Palmas (AHPLP)

Fondo Francisco Fernández Bethencourt (FFB)

Protocolos Notariales (PN)

- Archivo Histórico Provincial de Sta. Cruz de Tenerife (AHPSCT)

Archivo Zárate Cólogan (AZC) 

Archivo Román (AR)

Protocolos Notariales (PN)

- Archivo Parroquial de Guía

Libros sacramentales (actualmente en AHDC).

Bibliografía:

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- Arencibia Rodríguez, L. Los Troya en Gran Canaria. Publicado en Genealogías Canarias 19 abril 2013, visto 25 julio 2018.

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