Ponencia presentada en el IV Encuentro de Genealogía Gran Canaria,
organizado por Genealogías Canarias, celebrado en la Real Sociedad Económica de
Amigos del País de Gran Canaria, el 16 de noviembre de 2017.
INTRODUCCIÓN
Dificultades
y anécdotas con algunos apellidos investigados: Orihuela, Molina, Mauricio,
Tacoronte, Bolaños, Gil y Oliva. Aportaciones para el conocimiento de nuestras
raíces e identidad y su importancia y aplicación en el campo educativo.
Cuando
hablamos de Genealogía, de árbol genealógico u otros conceptos asociados a esta
ciencia auxiliar de la Historia, en la programación educativa, podemos afirmar
que es una gran desconocida, como si no tuviera ninguna relación con la
educación, o como si la genealogía fuera un concepto antiguo asociado a
familias de cierta nobleza y no tuviera nada que ver con el presente. Es como
si de repente el pasado que nos dio forma, que nos modeló como seres que
habitan en un lugar determinado, con una
identidad propia, no tuviese nada que
ver con nosotros. No ser capaces de ver más allá de nuestros abuelos, es
síntoma de la pérdida de valores y de conocimientos esenciales para entender
que el apellido es una anécdota que define parcialmente lo que somos. A veces
tenemos más genética de otros apellidos que no poseemos, que de los que figuran
en nuestro DNI y sin embargo cuando alguien se interesa por su genealogía se
centra en su primer apellido como si fuera lo más importante, pero que si
profundiza y avanza en el maravilloso mundo de su árbol descubre historias,
matices y situaciones que le sorprenden y que les pueden ayudar a comprender la
complejidad de sus raíces y de que la reencarnación no es otra cosa que la
herencia de todos aquellos antepasados que nos precedieron.
Familia en Gáldar, 1910. Revista Canarias Turista |
Sin
embargo, sin renunciar a todos nuestros ancestros, podemos intentar conseguir
el máximo de generaciones que definen la raíz desde el comienzo de un apellido y
que necesariamente en multitud de ocasiones se cruzan con la de otros y nos
muestran imprevistos parentescos. Otras veces siguiendo el camino de otras
raíces directas, pero no asociadas al apellido, podemos llegar a personajes
aborígenes o no, que pueden resultar muy interesantes y que nos ayudan a
entender la riqueza étnica que dio lugar a la población canaria.
EL
APELLIDO ORIHUELA (Oriola en valenciano)
Apellido toponímico derivado de la localidad
alicantina del mismo nombre.
En
esta rama o raíz genealógica, se puede comprobar como los apellidos se tomaban
siguiendo criterios muy diferentes a la actualidad, pero siempre relacionados
con la familia.
La alternancia entre
sucesos prósperos y adversos en la búsqueda de nuestras raíces nos atrapa,
divierte y ayuda a seguir el camino.
EL
APELLIDO MOLINA
Siguiendo
el mismo criterio que en el apellido anterior, investigando diferentes personas
que tenían en su árbol el apellido Molina, descubrimos que todos derivan a un
tronco común, por lo que si obviamos el comienzo nos podemos centrar en los
ancestros en los que comienzan las dificultades.
José Antonio Molina Moreno. Nace en Guía en 1705 y se casa en
1736. Hijo de:
Marcos de Molina Báez = Inés Delgado Moreno Díaz
Nace
en 1672 y casa en 1695, enviuda y casa con María Díaz de Armas. Hijo de:
Gonzalo
Hernández Báez Navarro = Jerónima de Molina
Debe
casar en torno a 1666-1668, ya que su hija Micaela nace en Guía en 1669.
Bautizo
en 1647, Guía. Fallece en 1739 libro 1 de Guía. Un mes antes de su
fallecimiento dictó su testamento ante el escribano Juan Ruiz de Miranda,
(AHPLP, folio 219vº hasta 221vº), donde se le nombra como Jerónima Molina y
Jerónima Castrillo, viuda de Gonzalo Báez, que vivía en la calle de Enmedio,
frente a la ermita de San Antonio, junto a la casa de Antonio Rodríguez y en la
trasera por la de los herederos de Martín Alemán y Ángel Trujillo, parte de la
casa con cocina la tenía cedida a su nieta Jerónima de Molina, renunció a favor
de su nieto José Antonio de Molina Moreno. Jerónima es la que
trasmite el
apellido Molina a sus descendientes. Es hija de:
Primera pila bautismal de Guía |
Diego de Molina Quesada = María Castrillo Díaz
¿Nace
en torno a 1589?, siendo una hipótesis que necesita confirmación puesto que su
matrimonio con María, se realiza cuando ella tiene 16 o 17 años y él 49 años.
Por lo que podría también, tratarse de un hijo suyo u otro familiar del que no
tenemos datos. Todo lo que sigue pues se trata de una investigación que nos
tiene ocupado a muchos enamorados de la genealogía.
Es
sin embargo con este matrimonio con el que se inicia la búsqueda de información
que aporte luz y rigor a dicha incógnita. Todo apunta a que podría tratarse de
un matrimonio de conveniencia, pero que no da certeza de los padres de Diego.
Mi
aportación a dicho reto, ha servido para iniciar un avance meritorio, sobre
todo por parte de Eugenio Egea Molina, publicando al respecto: Molina en Canarias, asentamiento en Gran Canaria y Molina de Gran Canaria. Relaciones de parentesco en los siglos XVIII y XIX.
Hijos
de este matrimonio bautizados en Guía: Ana 1640,
Lucas 1642, Francisco 1644, Jerónima 1647, Diego 1649, Cornelia
1652, María 1655 y Juan 1659.
Nuestra
sorpresa fue la comparación de los hijos de: Francisco de Molina Quesada y Franzances
y su esposa Francisca Ibáñez de Azoca en La Laguna, con los de Diego de Molina
y María Castrillo y que muestra con claridad el parentesco entre ambas
familias.
Hijos
de Francisco de Molina y Francisca Ibáñez: Diego
1626, Francisco 1632, Cornelia,
Ana, Guiomar, María
de San Gabriel (monja), Francisca de San Simón
(monja) y Luisa de la Visitación (monja). Demasiadas coincidencias para que no
exista relación. Hemos descartado al Diego hijo de Francisco de Molina, porque
se encuentra casado y teniendo hijos en Tenerife y por su edad
Muchas
son las lagunas y muchos los retos pendientes.
Con
los datos anteriores podríamos afirmar que es hermano de Francisco de Molina,
pero en los hijos que cita el Nobiliario de Canarias en su tomo I, no aparece
ningún Diego de Molina como hermano. ¿La fecha que le asignamos como hipótesis,
1589?, la hacemos porque su madre fallece en 1590, aunque también podría haber
muerto como consecuencia del parto. El hecho de fijar su residencia en Guía y
haberse desconectado de su familia podría ser la causa por la que no se le
cita.
Hijos
de este matrimonio bautizados en Guía: Ana 1640, Lucas 1642, Francisco 1644,
Jerónima 1647, Diego 1649, Cornelia 1652, María 1655 y Juan 1659. Si añadimos
los supuestos padres de Diego Molina y los de María Castrillo, completamos el nombre
de todos sus hijos, siendo costumbre de la época asignar a los hijos los
nombres de su familia.
Juan
Molina de Quesada = Cornelia de Franzances / Lucas Díaz de la Rosa = Jerónima Pérez Castrillo
Jerónima
dota a su hija María para casar con Diego.
Con
los padres de María, que si están confirmados y con los supuestos de Diego,
tenemos todos los nombres de los hijos de Diego asociados a sus ancestros. A
pesar de tantas coincidencias me gustaría refrendar la hipótesis de partida con
datos que dieran rigor y certeza a pesar de la abrumadora coincidencia.
EL
APELLIDO MAURICIO
En
este apellido todo apunta a que se origina en Gáldar, como consecuencia de una
situación que se da mucho en nuestro árbol. Los hijos de madres solteras que
dadas las condiciones sociales de la época tienden a ocultar dicha situación o
la de los hijos reivindicar a sus padres naturales.
Diego Ruiz Mauricio = María Josefa González Moreno, casados en Gáldar
en 1776, José Melián Mauricio = Isabel Ruiz, casados
en Gáldar en 1748, en el bautizo de sus hijos aparece como José Mauricio, pero
en su matrimonio como José Melián.
Lucía
Melián (b. 12-1-1711 en Gáldar)? Tiene por hijos a Juan que nace el 11-9-1723,
(Lucía tiene cuando da a luz, 12 años y 9 meses), Blas y José nacen el mismo
día, el 3-2-1725, (Lucía tiene 14 años y un mes). No hemos encontrado otros
hijos a partir de dicha fecha.
Juan
Melián = Ana Guerra Galindo, casados en
Gáldar en 1700.
Ángel
Melián González = María Felipe Bolaños Valladares / Francisco Galindo = María
de Miranda, casados en Guía en 1675.
He
planteado este apellido que aparece en el árbol de mis hijos, como una de las
múltiples facetas que necesitan una investigación complementaria que no he
podido desarrollar y que nos da una idea de lo complicado que puede resultar
una investigación en la genealogía cuando se dan estas circunstancias.
EL
APELLIDO TACORONTE
El
porqué de este apellido. Su irrupción en la zona no parece tener una
justificación familiar.
No
hemos encontrado apellidos que se relacionen con el mismo, por lo que debemos
seguir investigando las razones que llevan a su uso.
EL
APELLIDO BOLAÑOS
Del
apellido Bolaños, decir que todos los investigados en la zona, tienen como
ancestro último a Fernando de Cejas Saavedra, de quien no se conoce su esposa.
Resaltar
dos momentos de dificultad máxima en mi árbol, ya que no me fue posible
encontrar el nacimiento ni el matrimonio de una de las parejas de mis
abuelos Juan Mateo de Armas = María Bolaños
Guerra, que transmite a las siguientes generaciones el apellido, la
continuidad de la rama se realiza cruzando otros muchos datos en el que se
alternan los avances y los retrocesos, cientos de horas de análisis de
documentos de relacionarlos y contrastarlos para dar certeza a los mismos y
cuya información es muy amplia para tan poco tiempo. Siendo además al descubrir
a los padres de María, Francisco Felipe Bolaños
que el mismo había casado en Guía en 1652 con Ana Rodríguez González, con
varios hijos, que vuelve a casar en 1671 con Ana Guerra García, de Firgas, con
la que tiene también hijos entre los que se encuentra María Bolaños. Fue mi
querido amigo Juan Ramón García Torres el que encuentra dicho matrimonio que es
común a nuestros árboles genealógicos.
El
apellido Bolaños llega a Gran Canaria desde Lanzarote, y aunque es frecuente
desde el inicio de la conquista, necesita aglutinar la evolución del mismo
desde sus orígenes.
EL
APELLIDO GIL
Está
presente en la zona asociados a diferentes troncos originales y con
dificultades de datos que se repiten en muchos apellidos.
El
más significativo de todos ellos es el de Juan Gil Lorenzo.
Juan Gil Lorenzo =
María Encarnación Suárez González casados en Gáldar en 1717 (libro 3 f
308 vto.), bautizado en Guía en 1691 (libro 5 f 18).
Es
acusado por la familia quien será su esposa de estupro, dispensados del 4º
grado de
consanguinidad pagan penitencia. En su matrimonio con mucha literatura
sobre el mismo se narra la misma pero no aparecen sus padres. En el testamento
de Juan aparece el apellido Lorenzo sin que se nombre a sus padres. La
investigación coordinada con Juan Ramón García Torres nos permitió encontrar a
sus padres.
Altos de Gáldar, Caideros. |
Antonio
Martín Lorenzo = Agustina de los Reyes Gil Lorenzo casados
en 1690 en Guía
Los
padres de Agustina: Marcos Gil Díaz del Poleo =
Gregoria de los Reyes Lorenzo Déniz, casados en 1652 en El Sagrario.
Los
padres de Marcos:
Gaspar
Díaz = Agustina Gil.
EL
APELLIDO OLIVA
El
apellido Oliva tiene como último ascendiente al repoblador Hernán o Fernán Boza de Oliva, (hijo de Juan Bossa y
María de Oliva) que viene a Canarias con su hermano Pedro a mediados del siglo
XV: a Tenerife sobre 1550 y que luego se trasladan a Gran Canaria 1554, donde
se casa en Guía en 1566 con María Felipe Hidalgo. De su hermano Pedro no
conozco descendencia.
Hijos
de Fernán: Pedro Bossa - ¿?, Esteban Felipe - ¿?, Juan Oliva (1570), Diego (1572),
María (1574), Inés (1576), Fernando (1579), Estebana (1582) y Francisco (1587).
En
la investigación de mis raíces me tropiezo con Lucas de
Oliva
= María Jesús, cuyo
matrimonio no aparece, y se desconocen sus padres, por lo que recurro al
bautizo de algún Lucas que pudiera ser mi ascendiente. Me encuentro en Gáldar a
uno sólo. Lucas – 1643 hijo de Lorente de Betancor e Inés
de Oliva y al no encontrar ningún otro asociado al apellido Oliva, lo
doy por bueno pero cuando busco a sus hijos bautizados en Gáldar: Juana (1655),
Sebastián (1659), Juan (1664) y ¿María (1677)?, no cuadra que se trate de mis
ascendiente teniendo hijos con 12 años, por lo que a buscar de nuevo en la maraña
de datos a otro, Lucas bautizado en 1612 en Guía, hijo de Francisco Lorenzo y María
Felipe (casados en 1603), que por su edad debe ser hija de Fernán Bossa de
Oliva y María Felipe. Lucas es posible que intentó ser fraile, pues en algún
documento se le llama el frairecito.
Mi conclusión es por lo tanto que hay una rama de los Oliva que procede del
Matrimonio de Francisco Lorenzo con María Felipe, a quien Pedro González Sosa
la nombra como María Bilbao por confusión con la hija de su hermano Juan de
Oliva.