La lectura de
los distintos artículos que se han ido publicando en el blog Genealogías
Canarias, resultado de investigaciones exhaustivas en archivos históricos,
resultan de interés no solo por la cantidad de datos que van sucediendo sobre
apellidos y sus
orígenes, nombres, profesiones, matrimonios o filiaciones,
entre otros aspectos, sino porque estos apuntan a procesos históricos y socio
culturales más amplios en los que se van produciendo y reproduciendo.i
Desde este punto de vista, estos datos e informaciones extraídos de archivos
civiles y religiosos adquieren una especial relevancia etnohistórica aún y
cuando, como puede apreciarse en las motivaciones e inquietudes expresadas por
sus autores, el interés se inicie como inquietud personal por conocer orígenes
y trayectorias históricas de apellidos, antepasados y familias. A este respecto
cabría destacar que aunque este interés no suponga novedad alguna en las
sociedades occidentales, ya que incluso el estudio de genealogías se constituyó
en método de investigación académica hace más de un siglo, su utilización no solo se
ha extendido en las últimas décadas, sino que se ha intensificado como
consecuencia de los recursos, conexiones y formaciones de redes sociales que
propician el acceso a Internet; incrementándose, como en el caso específico de
este blog, la necesidad de compartir y debatir –ya sea formal o informalmente–
informaciones al respecto en la red.
La lectura de los trabajos
que se van publicando en este blog permite, no obstante, vislumbrar, más allá
del interés por ciertos datos históricos sobre apellidos y filiaciones –que a
menudo requiere de grandes dotes de paciencia para poder “desanudar” los “nudos
genealógicos” que se van sucediendo–,ii
la importancia que en estos procesos de filiación y reproducción de las
familias canarias ha tenido la íntima vinculación histórica de las islas con el
inicio y expansión del colonialismo y el capitalismo europeo, como así puede
apreciarse siguiendo la formación y conformación de linajes y familias de la
sociedad canaria.
HISTORIAS DE ANTEPASADOS Y MÉTODO GENEALÓGICO
Las Genealogías
Canarias retoman un método de investigación que surge precisamente en la
antropología del parentesco y que se denominó método genealógico para estudiar
procesos de filiación y proponer teorías sobre parentesco. Este método fue
propuesto a principios del siglo XX por el antropólogo británico W H. R. Rivers (1910) que,
desde planteamientos de partida evolucionistas, comenzó a utilizarlo para
estudiar estructuras sociales a partir de alianzas (por ejemplo, regulaciones
de los matrimonios) y filiaciones en sistemas de parentesco de poblaciones no
occidentales. Su propósito era establecer patrones universales con los que
comparar descendencias, herencias de propiedad, asignaciones de nombres,
religión e incluso desplazamientos migratorios. Más allá del ámbito académico,
lo que explica el interés que las genealogías todavía despierta en las
sociedades contemporáneas tiene que ver con lo que Rivers había percibido en la
sociedad victoriana en la que vivió al afirmar que a “todo el mundo le gusta
hablar sobre su genealogía, contar historias sobre sus antepasados”. iii
A pesar de que el método
genealógico continúa siendo un utilizado en investigaciones etnográficas, tanto
en la antropología como en otras disciplinas, éste fue pronto criticado con
respecto a las pretensiones científicas de su autor. El funcionalismo británico
consideró, entre otros aspectos, que el método era especulativo en cuanto a su
reconstrucción histórica del parentesco y, décadas más tardes, autores como el
estadounidense David Schneider (1968) consideraba frente a las pretensiones de
su propulsor que, puesto que la valoración que pueda hacerse de las genealogías
es muy diversa –tanto en sus formas como en sus significados culturales–, éste
no podría utilizarse para buscar leyes universales.iv
A pesar de éstas y otras
críticas, este método no solo se ha convertido en un referente en la
disciplina, vinculado, por otra parte, al desarrollo del trabajo de campo
etnográfico, sino que desde entonces se ha estado utilizando más allá de los
estudios de parentesco incorporándose como método de investigación en otras
disciplinas; siendo utilizado en las últimas décadas en ciencias sociales, en su
sentido más foucaultiano, como un modo de aproximarse desde la historia al
conocimiento de las relaciones asimétricas de poder de las sociedades
contemporáneas. Desde esta perspectiva, las genealogías de distintos tipos y
niveles propician nuevas orientaciones que han redirigido planteamientos e
interpretaciones; incluso cuando el interés inicial pueda centrarse en el
estudio de familias y antepasados.v
Los autores de los artículos del blog Genealogías Canarias destacan
precisamente complejidades y contradicciones a la hora de interpretar nuevos
datos sobre matrimonios, filiaciones y demás, apuntando a la necesidad de
situarlos en contextos más amplios para poder comprenderlos. De ahí lo
complicado que se hace “desanudar” los “nudos genealógicos” que se van
sucediendo.
CONQUISTA,
COLONIALISMO Y DIVERSIDAD SOCIAL
Las islas
Canarias después de su conquista por los castellanos, y su repoblamiento, se convirtió en un crisol de
indígenas de orígenes bereber, además de oleadas de personas procedentes de
diferentes lugares: España, Portugal, Normandía, Génova y Flandes (…) así como
de aquellos que se trajeron obligados e ignominiosamente fueron convertidos en
esclavos: africanos y berberiscos.vi
Uno
de los aspectos que más se reiteran en los artículos del blog Genealogías
Canarias es la insistencia en la diversidad de los orígenes étnicos de las
familias canarias: canarii (en el caso de Gran Canaria), castellanos,
andaluces, portugueses, genoveses, normandos o flamencos, entre otros. Esta
diversidad no hace más que incidir en la íntima vinculación de la formación de
la sociedad canaria con la expansión colonial
europea y con sus relaciones
inter-atlánticas ligadas, por ejemplo, al comercio de esclavos en los inicios
de la conquista, al de la caña de azúcar, fundamentalmente desde finales del
siglo XIV hasta el siglo XVI, o a su continua dependencia desde entonces de las
demandas del mercado internacional. A este respecto cabría destacar datos que
aportan artículos como los de Eugenio Egea Molina
y Faneque Hernández Bautista y Juan García Torres
referentes a apellidos canarios, normandos, flamencos o genoveses y que se
contextualizan históricamente con el auge de la producción de la caña de azúcar
para la exportación; propiciando desplazamientos de población tanto del
continente africano como europeo: esclavos mayormente africanos para trabajar
en los ingenios que se expandían por el litoral de Gran Canaria, hacendados peninsulares
beneficiarios de los repartimientos de la conquista o comerciantes europeos
buscando las oportunidades de un comercio floreciente en el Atlántico; al
tiempo que la población autóctona prehispánica había sido, después de un siglo
de conquista, diezmada, esclavizada o forzosamente asimilada.vii
Ilustración de Le Canarien |
Desde entonces, la economía
canaria, que ha estado totalmente dependiente de los monocultivos demandados
por el mercado exterior, ha ido incidiendo en el desarrollo asimétrico de su
estructura social; como así se reitera en los distintos artículos del blog:
tanto en la reproducción endogámica de las familias, por ejemplo, como en los
sucesivos desplazamientos de población hacia América. Cabe destacar al respecto
las migraciones familiares de ida y vuelta a Cuba, y posteriormente, a Estados
Unidos destacadas por María Castellanos Collins (2014) en Familia Castellano: moyenses, indianos y cubanos.viii
Desplazamientos y migraciones comunes en las familias canarias hasta muy
recientemente, destacándose las migraciones a Cuba y hasta décadas recientes a
Venezuela.
GENEALOGÍAS
Y GENTE SIN HISTORIA
En Canarias, acabada la
conquista, los indígenas debían ser bautizados y adoptar nombres cristianos.
Dado el desconocimiento que tenían del vocablo hispano y de los nombres
católicos, tan diferentes a sus nombres de origen bereber, se les otorgaba el
nombre y apellido de un padrino de bautismo que naturalmente era católico
extinguiéndose así casi la totalidad de los apellidos indígenas.ix
Entre los datos y las
informaciones que en los distintos artículos se presentan sobre los orígenes de
los apellidos canarios se soslaya la importancia que
ciertas instituciones tuvieron antes incluso que se iniciara la conquista, como
por ejemplo la esclavitud, mencionado anteriormente, su extensión posterior al
continente americano o su persistencia después de la conquista. También
cabría destacar la importancia que instituciones como el padrinazgo desempeñó
en los procesos de asimilación de la población canaria prehispánica o las
constantes referencias a la imposición y adquisición de nombres y apellidos
castellanos o portugueses.x
En los
escritos, además de subrayarse la importancia de la reproducción endogámica de
las familias con respecto a matrimoniales y filiaciones, también se destaca el
hecho de que los hombres accedieran a estructuras de poder ocupando cargos en
administraciones locales o perteneciendo a órganos o cofradías religiosas.
Desde estas relaciones endogámicas de poder cabría destacar también, desde una
perspectiva de género, el papel o el protagonismo que las mujeres canarias han
desempeñado desde posiciones subordinadas de poder incluso antes de la conquista. A este
respecto cabría hacer referencia al artículo de Cristina
López Díaz (2012) Apellidos canarios, una riqueza cultural
cuando trata la preferencia en la adscripción de los apellidos maternos durante
varios siglos en las islas.
Todas estas
informaciones que se han ido aportando en estos años sobre las genealogías de
los apellidos canarios posibilitan desde una contextualización histórica el
conocimiento de la reproducción de la familia en Canarias siguiendo procesos de
identidad, clase, género o generación que se articulan a contextos más globales
generados por la conquista, el colonialismo o la expansión del capitalismo
europeo. Y es que tanto el origen como el desarrollo posterior de la sociedad
canaria representan desde esta perspectiva un ejemplo en donde observar y
analizar lo que Eric Wolf (1986) denominó Europa y la gente sin historia;
en cuanto que surge y se desarrolla a partir de estructuras de poder que se originan
y re-estructuran como consecuencia de la expansión colonial y capitalista
europea; y como así puede muy bien apreciarse cuando los autores contextualizan
las trayectorias de los apellidos en las distintas ramas de las familias
canarias. xi
NOTAS
i Entre otras fuentes primarias documentos de
archivos históricos provinciales, como Archivo Histórico Provincial de Las
Palmas, o diocesanos y parroquiales de distintos
municipios grancanarios (Moya, Teror, Arucas, Gáldar, Guía, Telde, etc.).
ii Eugenio Egea Molina
(2014) Melián de Ortega convergencia de linajes en la Villa de Moya Publicado en el blog Genealogías Canarias el día 1 de marzo de
2014.
iii A diferencia de cómo se
suele emplear actualmente a través de archivos históricos, Rivers (1910) lo
utilizó en sociedades ágrafas a partir de entrevistas mantenidas con
informantes con la finalidad de conocer genealogías más inmediatas para
proponer leyes de carácter universal. Ver W. H. R. Rivers (1910) El método
genealógico de investigación antropológica. En Juan Aranzadi Martínez (2008) Introducción
histórica a la Antropología del Parentesco. Madrid: Editorial Universitaria
Ramón Areces (141-151).
iv Ver D. M. Schneider (1984)
“Some Fundamental Difficulties in the Study of Kinship:” En Juan Aranzadi
Martínez (2008) Introducción histórica a la Antropología del Parentesco.
Madrid: Editorial Universitaria Ramón Areces (151-158). O Robert Parkin y Linda
Stone (2007) “Introducción general.” En Antropología del parentesco y de la familia. Robert Parkin y Linda Stone (comp.) Madrid: Editorial
Universitaria Ramón Areces, pp. 41-70.
v Sobre el alcance del
método genealógico en el estudio de las historias de familia a través de
archivos, registros civiles y religiosos o padrones ver el artículo de María
Isabel Jociles (2006) Método genealógico e historias familiares. Estudios en el espacio teórico del parentesco. Fermentum. Revista Venezolana de
Sociología y Antropología, 16(47): 793-835.
vi Eugenio Egea Molina
(2012) Apellidos genoveses en Canarias: unas notas.
Publicado el 11 de agosto de 2012 en Genealogías Canarias.
vii Ver también Alfred Crosby
(1988) Imperialismo ecológico. La expansión biológica de Europa, 900-1900.
Barcelona: Crítica o Eric Wolf (1986 [1982]) Europa y la gente sin historia.
México, D.F.: FCE.
viii María
Castellanos Collins (2014) Familia Castellano: moyenses, indianos y cubanos.
Publicado en el blog Genealogías Canarias el 15 de febrero de 2014.
También podrían citarse,
entre otros trabajos sobre canarios en América, el de James Parsons (1983) “The
Migration of Canary Islanders to the Americas: An Unbroken Current Since
Columbus.” The Americas, 39(4): 447-481, o la monografía de Gilbert Din (1999) The Canary
Islanders of Louisiana. Louisiana State University Press.
ix Cristina López
Díaz (2012) Apellidos canarios, una riqueza cultural. Publicado el 11 de agosto
de 2012 en Genealogías Canarias.
x Como
el caso destacado por Eugenio Egea Molina,
en el artículo Apellidos de antiguos pobladores de la Villa de Moya: siglos XVI-XVIII (III), de la adopción de Tenesor Semidán que fue bautizado como
F(H)ernando Guan(d)arteme.
xi Eric Wolf (1986 [1982]) Europa y la gente sin
historia. México, D.F. FCE.