domingo, 8 de septiembre de 2013

ASCENDENCIA LANZAROTEÑA DE APELLIDOS LEÓN Y BETANCOR (I)

FANEQUE HERNÁNDEZ BAUTISTA
JUAN RAMÓN GARCÍA TORRES

A) PEDRO PONCE DE LEÓN
Esto es lo que nos dice Gonzalo Argote de Molina (autor del siglo XVI) en su libro Nobleza de Andalucía acerca de este personaje:
Doña Sancha de Baeza, hija de don Juan Ruiz de Baeza y de Doña Teresa de Haro y Don Pero Ponce de León su marido rico hombre y Señor de Marchena…tuvieron por hijo a don Pero Ponce de León, Conde de Medellín, Señor de Marchena el cual como rico hombre confirmó los privilegios del rey D Juan el segundo. Anduvo en las guerras de Antequera Cañete y Ronda contra moros. Quemó el valle de Cártama e hizo otros notables y señalados hechos. Fue muy valeroso y de mucha prudencia, y así el rey D Juan lo tuvo en su Consejo y le encargó y cometió negocios muy arduos. Casó con doña María de Ayala hija de Pero López de Ayala, chanciller mayor de Castilla. Está enterrado en la Capilla Mayor del monasterio de San Agustín de Sevilla junto con sus pasados en cuyo sepulcro hay este letrero: “Aquí yace don Pero Ponce de León conde de Medellín, Señor de Marchena…” Tuvo Pero Ponce de León en doña María de Ayala a don Juan Ponce de León y a don Luis Ponce de León, Señor de Villagarcía, y a don Fernando Ponce de León y a doña Sancha, mujer de don Alonso Pérez de Guzmán, Señor de Orgaz, y a doña Elvira, mujer de Alonso Fernández de Córdoba, Señor de Alcaudete”.
Alcaudete-Jaén
Argote de Molina también cita en su libro, todo un clásico de la genealogía publicado en 1588, a su propia esposa con estas palabras:
Desciende de Mosén Maciote de Betencourt doña Constanza de Herrera de Rojas y Betancur, condesa de Lanzarote”
Le faltó decir que Constanza era el fruto de los amoríos entre Agustín de Herrera y Rojas, primer conde de Lanzarote, y Bernardina de Cabrera, hija de Luis León el valiente, nieta de Luis León el viejo y por tanto bisnieta de Pero Ponce de León el Señor de Marchena. Es probable que esto último no lo supiera pues de otro modo esa información, por convenir a sus ansias de grandeza, la hubiera publicitado en su libro.

B) LUIS DE LEÓN "EL VIEJO"
Acerca de Luis de León el viejo y de sus circunstancias vitales, Cebrián Latasa en su Diccionario de conquistadores nos dice lo siguiente:
Hijo natural de don Pedro Ponce de León, Señor de Marchena. Vino a las islas con las gentes de Diego de Herrera e Inés Peraza hacia el año 1455. No será conquistador de las islas realengas aunque sí sus hijos atraídos a Gran Canaria y Tenerife como repobladores mediante la adjudicación de tierras en repartimiento. Los genealogistas tradicionales lo hacen casado con Elvira Pérez de Munguía, hija de Juan Pérez de Munguía y Margarita Perdomo. Hijos:
  1. Luis de León el mozo conocido por sus hechos de armas en el encuentro de Tafaraute. Se casó con Ana de Cabrera. Vecinos de Tenerife y Lanzarote. Sostuvo relación carnal con la morisca Juana Pérez de Munguía, de quienes quedó descendencia.
  2. Fernando de León casado con Catalina Fernández. Vecinos de Tenerife.
  3. Bartolomé de León casado con Ana Rodríguez de Sanabria. Vecinos de Jerez de la Frontera.
  4. Juan de León casado con Luisa Sánchez de Morales. Vecinos de Gáldar.
  5. Catalina Pérez de Munguía (¿) casada con Ginés de Cabrera Solier. Vecinos de Lanzarote
Parece que nuestro preclaro genealogista tiene dudas al respecto de la identidad de la esposa o esposas de Luis de León el viejo pues nos dice:
Luis de León el viejo, casado con Elvira Pérez Hernández, tuvo a Iseo de León, que mantendría relación carnal con Pedro Hernández de Saavedra y casó con Guillén Peraza, procreando hijos con ambos”.
Para resolver el entuerto, acude en nuestra ayuda el anónimo escribano del obispo que confeccionó en el siglo XVIII, rastreando con paciencia y acierto incalculables en los protocolos notariales, la famosa carpeta del Archivo Diocesano. En una de sus prodigiosas notas nos dice:
Leonor de León, mujer de Mateo Verde; María de Bilbao, mujer de Juan Perdomo “el bermejo”; Francisca de León, mujer de Lucas Perdomo; Justa de León, viuda; Elvira Pérez, mujer de Ruy Leme; y Juana Pérez, mujer de Benito Díaz de Morón; hermanas de Luis e Iseo de León y por consiguiente hijos todos de Luis de León y Elvira Pérez; todo consta de dicha partición pues aunque esta no se hizo mas que entre la Iseo y el Luis, fue porque este había comprado los derechos que tocaban a los demás sus herederos”.
El documento es excepcional. Nuestro ávido lector de protocolos, muchos de los cuales no están hoy, por su deterioro o pérdida, a disposición de los investigadores, nos informa de un plumazo de cinco hijas más de Luis de León el viejo que, junto a Iseo, constituyen el conjunto de herederos de determinada propiedad. El copista no nos da más información para saber a qué propiedad se refiere la partición, pero resulta sorprendente que no aparezcan en dicha relación, excepto Luis e Iseo de León, ninguno de los demás hijos citados por Cebrián Latasa. Podemos pensar en consecuencia que la partición fue tardía y que aquellos ya habrían fallecido o bien que no contaban por encontrarse fuera de la isla o más sencillamente que no eran los herederos de esa propiedad en concreto por ser hijos del primer matrimonio. En el caso de Fernando, sabemos que murió asesinado en Tenerife en 1505; de Bartolomé sabemos que residió en Jerez de la Frontera, y de Juan, que fue vecino de Gáldar. El único de los citados que estuvo efectivamente avecindado en Lanzarote fue Catalina Pérez, la mujer de Ginés de Cabrera pero como el propio Cebrián Latasa admitirá indirectamente esta no era hija del matrimonio citado como después veremos. Datamos pues el documento rescatado por nuestro anónimo benefactor a mediados del siglo XVI.
A partir de su lectura podría concluirse, efectivamente, que todas las nombradas son hijas legítimas de la segunda esposa de Luis de León el viejo, Elvira Pérez Hernández, puesto que heredan conjuntamente una hacienda y que es Luis de León el mozo, un hijo del primer matrimonio, hermanastro de las anteriores, quien trata de hacerse con la propiedad de la misma.
Tenemos pues, en Lanzarote en el siglo XV a un hidalgo andaluz, Luis de León el viejo, que forma parte de las mesnadas feudales del Señor de las Islas Don Diego de Herrera, casado con dos Elviras, la primera de noble ascendencia indígena y betancuriana, Elvira Pérez de Munguía y la segunda de probable ascendencia morisca Elvira Pérez Hernández.
Marchena-Sevilla
De este personaje, Luis de León el viejo, tenemos acreditada su ilustre origen como ya fue señalado por Abreu Galindo, a saber, su padre es don Pedro Ponce de León, Conde de Arcos de la Frontera (antes lo había sido de Medellín) y Señor de Marchena, de la alta nobleza de Andalucía. Será después de la muerte de su padre y de la asunción del Señorío y el Condado por parte de su hermanastro Juan Ponce de León en 1448 cuando el bastardo Luis de León debió verse obligado a migrar a otras tierras acudiendo al Señorío de la Islas de Canaria como vasallo de don Diego de Herrera. Creemos que su llegada a las islas debió producirse en torno a 1470, fecha posterior a la que da Cebrián Latasa. El hecho de ser hijo natural no le supuso al parecer demérito en su rango social pues Luis de León va a ejercer de gobernador de Lanzarote, convirtiéndose en primera autoridad de la isla después del Señor. Sobre el lugar de su nacimiento consta en una de las informaciones solicitadas por sus descendientes en el siglo XVIII que, según sus propias palabras, habría nacido en Granada, lo cual nos parece bastante dudoso dado que en esas fechas Granada era la capital del reino nazarí.
De Elvira Pérez de Munguía, su primera esposa, hemos de decir que era hija de otro destacado vasallo de los Señores de las Islas afincado en Lanzarote. Cebrián Latasa nos describe de este modo a su padre, Juan Pérez de Munguía el viejo, más conocido como Perucho de Bilbao:
Abreu lo sitúa como miembro de las gentes de Diego de Herrera hacia 1455. Vizcaíno que se avecindó en Lanzarote. Será de los llamados de las Islas. Se le puede considerar conquistador de Gran Canaria. Casó con Margarita Perdomo, hija de Arriete Perdomo y de Margarita de Bethencourt. Hijos:
  1. Juan Pérez de Munguía el mozo casado con María Sánchez, hermana de Ana Sánchez, mujer de Fernando de Llerena.
  2. Elvira Pérez de Munguía casada con Luis de León el mozo.
  3. Diego Pérez Betancor casado con Inés de Buenavía Cardona.
  4. Inés de Betancor casada con Luis de Sanabria.
  5. Catalina Pérez de Betancor casada con Ginés de Cabrera Solier” (¿)
A continuación les mostramos en el cuadro adjunto la ascendencia materna de Elvira que otorga a su hijo Luis de León el mozo el honor de provenir de la realeza indígena de Lanzarote. Quizá este pueda ser el linaje indígena más antiguo que, siguiendo la tradición oral, exista en el Archipiélago. Con todas las reservas lo mostramos a sabiendas de que no existen pruebas documentales de respaldo. Es un árbol bien conocido al que aportamos una novedad. Puesto que en el mundo indígena los linajes maternos son los que deciden la sucesión hacemos a Fayna madre de Ico, independientemente de que Zonzamas sea su padre y así sucesivamente.

C) LUIS DE LEÓN "EL VALIENTE"
a) REFERENCIAS HISTÓRICAS
Una Información de limpieza de sangre de principios del siglo XVII solicitada por Pedro Sarmiento de Ayala, quien aspiraba a ser designado familiar del Santo Oficio y alguacil de dicho Tribunal, nos aporta noticias relevantes acerca de Luis de León el mozo. En el transcurso de dichas pruebas, un morisco de 90 años llamado Alexandre de Saavedra, criado que fue de Pedro Fernández de Saavedra, se manifiesta en estos términos acerca de nuestro ascendiente:
“…el dicho Luis de León fue hombre muy principal y caballero en esta dicha Ysla (Fuerteventura) porque lo mandaba todo por orden de doña Catalina de Escobar de las Roelas, madre que fue de Pedro Fernández de Saavedra…señora que era de esta dicha isla por fin y muerte del dicho su fijo…”
Aclaramos que la tal Catalina de Escobar, cuya ascendencia desconocemos, fue una de las mujeres que, en relación extraconyugal, tuvo Fernán Darias, hijo de Pedro Fernández de Saavedra y de Constanza Sarmiento, la hija pequeña de don Diego de Herrera y de Inés Peraza. (No hay que confundir a esta Constanza Sarmiento con otra mujer de igual nombre que casará con el hijo de Catalina Escobar llamado como su abuelo, Pedro Hernández Saavedra, y que era descendiente de Sancho de Herrera y Catalina Dafía, nieta del último rey de la isla)
En “El relato de la famosa batalla de Tafaraute”, publicación del insigne genealogista Leopoldo de la Rosa Olivera, hemos encontrado esta otra referencia acerca de Luis de León y su descendencia:
Del héroe principal de la hazaña, Luis de León el valiente, sabemos que era hijo de Luis de León el viejo, uno de los hidalgos que acompañaron a Diego de Herrera y a doña Inés Peraza en su venida a las islas y gobernador por estos de Fuerteventura… Luis de León, como hombre noble (que era), mandó poner almenas en su casa de Testeina; casó dos veces y tuvo de ambos matrimonios trece hijos”.
Como curiosidad les diremos que el topónimo guanche Testeina está localizado en la zona de La Geria, en el actual municipio de Tías, dentro del cual existen dos accidentes que llevan dicho nombre: una Montaña y un volcán siendo esto último, según la web Toponimia de Lanzarote, lo que en el habla local de Lanzarote se entiende por tal: un territorio cubierto de lavas recientes. El nombre de la montaña se debe a la aldea que existió en dicho lugar antes de las erupciones volcánicas que en el siglo XVIII (Timanfaya) destruyeron todo el centro-oeste de la isla. Entre los “lugares perdidos por el fuego que ha corrido por ellos”, dice un testigo de la erupción en 1733, estaba Testeyna con tres vecinos, es decir, tres casas de familia.
b) LA BATALLA DE TAFARAUTE
Narración de los hechos por parte de Diego de Cabrera León, hijo de Luis de León el valiente ante el escribano Francisco Amado, Betancuria (1593):
Se halló…en la famosa batalla de Tafaraute que el gobernador de Fuerteventura Luis de León…hubo con los moros el día de Todos los santos del año de quarenta y nueve. Aquella batalla de Tafaraute fue una de la más famosas victorias que Dios Nuestro señor ha dado a los destas islas, porque aviéndose alçado los navíos y quedado el gobernador Luis de León solo en tierras de moros con noventa hombres y diez caballos, peleó con ellos y venció y prendió muchos, y con la presa vino caminando por la costa de los moros comienzo solamente raízes de hiervas hasta llegar al cabo Blanco donde se embarcaron en navíos de pesquería que allá hallaron de cristianos…”
Sobre las hazañas de Luis de León en África mucho habría que decir. Las razias cristianas en busca de esclavos asolaron durante siglos las costas africanas vecinas. El asalto armado a las poblaciones del actual Marruecos determinó un floreciente negocio pues por cada bereber capturado se podían obtener hasta dos o tres esclavos negros por su rescate, más aún si se trataba de algún jefe tribal. La crueldad con la que se desplegaron los campeones africanos sería devuelta con creces en sucesivas operaciones de castigo
Tafaraute-Marruecos
de las armadas berberiscas, lo que obligó a la Corona española a prohibir las incursiones en tierras del Xerife aunque estas continuarían durante bastante tiempo en territorios más al sur que se corresponden con lo que fue la colonia española del Sáhara Occidental. Hasta tal punto fueron graves las represalias berberiscas sobre la isla, nos dice el apreciado cronista de Teguise, “que entre 1569 y 1586 más de 700 lanzaroteños entre hombres, mujeres y niños fueron obligados a dejar esta tierra convertidos en esclavos de los que solo pudieron ser rescatados unos 50”.
Volviendo a la batalla de Tafaraute de 1549 deseamos cuestionar la supuesta heroicidad de Luis de León y de sus noventa hombres en su supuesto largo recorrido por las costas africanas llevando consigo a la presa humana, un recorrido que según algunos autores debió superar el millar de kilómetros hasta alcanzar cabo Blanco donde pudieron finalmente embarcar en naves cristianas. Rumeu de Armas en su obra El Señorío de Fuerteventura en el siglo XVI plantea sin embargo que:
No hay que descartar que el accidente aludido sea otro cabo Branco señalado en algunos documentos portugueses no lejos de Tamaraque; en este caso Tafaraute habrá que buscarlo al norte del río Sus así como también el escenario completo de la acción”.
Nos decantamos por esta última posibilidad señalando además que los esclavistas debieron enfrentarse a grupos de pastores nómadas y no a un verdadero ejército berberisco como el que en 1500 había derrotado en Asaka a la cabalgada de Alonso Fernández de Lugo en la que perdieron la vida centenares de asaltantes entre ellos el canario Pedro Maninidra.
c) DESCENDENCIA DE SU PRIMER MATRIMONIO
Luis de León el valiente tuvo hijos legítimos con Ana de Cabrera Solier la hija del noble andaluz Diego de Cabrera Solier y de su esposa Catalina Luzardo de Franchi de ascendencia genovesa. Así que la ascendencia betancuriana que postula Argote de Molina para su esposa, nieta de los citados en primer lugar, proviene de su bisabuela paterna, Elvira Pérez de Munguía, como pudimos comprobar en el cuadro anterior.
Hijos legítimos de Luis de León y Ana de Cabrera de los que tenemos referencias, son, entre otros, los siguientes:
- El mayor fue Diego de Cabrera León, el relator ante el escribano en 1593 de la batalla de Tafaraute, capitán de las gentes de a caballo en Fuerteventura, familiar y alguacil mayor de la inquisición. Casado con Inés Grimanesa Melián tuvo sucesión, habiéndose identificado como hijo de dicho matrimonio a Marcos Perdomo Cabrera casado con Ana Sánchez de Cardona. Al parecer Diego de Cabrera estuvo afincado durante un cierto tiempo en Agüimes, isla de Gran Canaria, como consta en un protocolo de dicha escribanía del año 1572 cuyo encabezamiento dice:
Diego Cabrera de León y Amador Espino como alcaldes de las aguas del heredamiento de la villa de Agüimes y herederos de la acequia real de Aguatona…, por sí y por los demás herederos, dan la acequia a Francisco Miraval, vecino de la villa, para que durante un año…sea acequiero y repartidor en ella…”
Este extraño paradero de Diego Cabrera en Gran Canaria que quizá pueda explicar el origen del apellido Cabrera en el sureste de la isla será motivo de atención en el apartado referido a la muerte de Luis de León.
- Bernardina de Cabrera, aunque casada con Teodoro Espelta, fue no obstante la concubina del conde de Lanzarote. Con él tuvo a sus hijas Constanza y Juana de Herrera que en 1576 serían legitimadas por el rey. Juana casó con Francisco Accioli de Vasconcelos en Madeira en 1588, isla en la que su padre, años antes, había ejercido de capitán general, lo que le valió para ascender en la escala nobiliaria de conde a marqués por decisión de Felipe II. Constanza, a quien el marqués donó el título de Condesa de Lanzarote cuando este obtuvo el marquesado, casó en 1586 con Gonzalo Argote de Molina, Provincial de la Hermandad de Andalucía, con quien tuvo descendencia que no prosperó. Lobo y Bruquetas en su libro Agustín de Herrera y Rojas I Marqués de Lanzarote nos relatan las relaciones amorosas de Bernardina con el marqués y cómo este, en determinada ocasión, tuvo que salir de la casa por un agujero de las tapias cuando apareció inopinadamente el padre de su amante, Luis de León, con la intención de lavar la afrenta. Por aquellas fechas moriría en extrañas circunstancias el esposo ultrajado: Teodoro Espelta el petimetre marido genovés de Bernardina, hecho que introduce “sombras de deshonor en la memoria de don Agustín de Herrera”, según los autores citados. 
- Juan de León Cabrera gozó de la especial confianza del conde de Lanzarote tanto en el Señorío de las islas orientales como durante el corto periodo de su capitanía general en Madeira en el que descabezó a los rebeldes que no aceptaban la legitimidad de la posesión de aquellas tierras por parte del rey español Felipe II. (Uno de los cabecillas fue ahorcado y a otro se le dio garrote). Allí Juan de León, nos dice Rumeu en su artículo en AEA “El Conde de Lanzarote, Capitán General de la isla de La Madera (1582-1583)”, fue nombrado alcaide de la Fortaleza Nova donde tendría cuartel una parte de la mesnada señorial. En Lanzarote, Juan ostentó, entre otros, el cargo de mayordomo de la casa señorial de Teguise, familiar del Santo Oficio, etc. Según los historiadores Lobo y Bruquetas, su nombramiento como mayordomo vendría dado por el intento de arreglar o componer las cosas con la familia de su amante:
La posible connivencia con las relaciones del marqués con su hermana quedarían pagadas no solo con este empleo sino con su matrimonio con una sobrina de don Agustín llamada Ana Viciosa que era hija de Juan de Saavedra, hermanastro de don Agustín. Fue agraciado pues Juan de León con la donación del término de Tenesoara …y su esposa con la isla de Montaña Clara… con lo que de algún modo el marqués pagaba la demostrada amistad de Juan León al no haber vengado la muerte de su padre (?) y admitir la relación extramarital con su hermana”.
-En los Protocolos viejos de Fuerteventura hemos encontrado otro vástago legítimo que tiene por nombre Juliana. Se trata de un poder otorgado en 1606 por Francisco de Morales Perdomo, vecino, como marido y conjunta persona de Felipa Anríquez, hija y universal heredera de Diego Alonso Sanabria y de Juliana de Cabrera, en el que se especifica que esta lo era a su vez de Luis de León y de Ana de Cabrera, su mujer.
-Por último tenemos también referencias, como hija de Luis de León el valiente, de Cataliza Luzardo cuya trayectoria genealógica ha sido estudiada por Lola García Cabrera, una de sus descendientes, en un reciente artículo publicado en el blog genealogías canarias titulado “Villavivencio, otro eslabón majorero”. 
d) DESCENDENCIA DE SU SEGUNDO MATRIMONIO
Cuando ya pensábamos que íbamos a quedarnos en la indefinición acerca de la identidad de los padres de María León, nuestra ascendiente, un hallazgo de Juan Ramón García Torres, compañero de investigación en estas lides genealógicas, en el Archivo diocesano vino en nuestra ayuda:
Luis de León, viudo de Ana Cabrera, casó en segundas nupcias con Juana Pérez en Lanzarote y falleció en la Villa de Agüimes en la casa de su hijo Diego de Cabrera; y tuvo con esta cinco hijos que lo fueron María, Catalina, Elvira, Juan y Francisco. Esto y lo antecedente consta en autos seguidos por la tal Juana Pérez”
De remplón, esta nota nos informa de toda la descendencia de Luis de León y Juana Pérez de Munguía, su segunda esposa de ascendencia morisca, a quien llaman “la Salmona”. Da la impresión de que Juana Pérez litiga por la herencia de su marido para beneficiar a sus hijos. Pero lo más relevante sin duda es la información relativa al lugar de defunción de Luis de León el valiente que ciertamente no sorprendió.
Además de María León, la primogénita, por quien sigue la línea tenemos referencias de otro de los hermanos que aparecen citados en dicho documento. Según Lobo y Bruquetas, Juan de León Munguía, el quintador del marqués, fue herido mortalmente en 1581 en la defensa de Teguise cuando tropas francesas al mando de Testu y La Motte fueron repelidas por la infantería morisca del Señor de Lanzarote. Creemos que este Juan de León Munguía no puede ser confundido con Juan de León Cabrera puesto que este último, como ya dijimos, formó parte de la expedición que en 1582 toma posesión en nombre de Felipe II de la isla de La Madera. El herido o fallecido es pues un hermanastro del anterior.
Como colofón de estos apartados referidos a su descendencia, queremos destacar que el apellido León se extiende como un reguero por las islas y también, desde fechas muy tempranas, por el Nuevo Mundo donde hay constancia, según el venerable cronista de Teguise, Francisco Hernández Delgado, de un Luis de León que se establece en Cartagena de Indias en 1569 y, poco después, del establecimiento en Cáceres de Antioquía de Beatriz Dumpiérrez, hija del Capitán Luis de León y de Luisa Dumpiérrez, que emigra con cinco sobrinos. La extensión del apellido no solo se produce a partir de la numerosa descendencia, legítima o natural, de Luis de León “el viejo” y de su hijo “el valiente” sino también a partir de la imposición de su nombre y apellido a esclavos bereberes que, bautizados a la fuerza, pasaron a convertirse en respetados vecinos moriscos del Señorío. Sirva como ejemplo la siguiente referencia de Lobo y Bruquetas en su libro tantas veces citado a los preparativos de una expedición de rescate en 1569 en el carabelón del Conde “donde iba por maestre y piloto, Rodrigo Yanes Franco, por capitán, Juan Monguía y por lengua (es decir intérprete) Luis de León, morisco, vecino de Lanzarote”. Antes de su partida desde el puerto de Las Palmas el Inquisidor determina que el capitán y el lengua citados debían hacer juramento ante el vicario de Lanzarote para evitar su deserción.
e) LA MUERTE DE LUIS DE LEÓN
Tenemos dos fechas de referencia para enmarcar su fallecimiento. En 1549 a mediados de siglo nuestro ascendiente tomaba parte en la batalla de Tafaraute, y en 1589 su hijo mayor testifica acerca de las hazañas de su padre hablando en pasado, es decir señalando que este era ya difunto. Entre esos dos hitos de la segunda mitad del siglo XVI tuvo lugar su fallecimiento. La fecha probable se sitúa en torno a 1572, fecha en la que como ya se ha dicho su hijo mayor, Diego Cabrera de León, estuvo afincado en Agüimes, isla de Gran Canaria
Debía ser por entonces un hombre de edad avanzada si presumimos que su padre había nacido antes de 1448, fecha de la muerte de su abuelo Pero Ponce de León. Si efectivamente fue un hijo del primer matrimonio de su padre con Elvira Pérez de Munguía debió nacer antes del 1500 por lo que su muerte debió acontecer cuando contaba con más de 70 años. Parece sin embargo, por las cuentas que hacemos, que cuadrarían mejor las fechas si lo hacemos hijo del postrer matrimonio con Elvira Pérez Hernández. Lo verdaderamente enigmático es en todo caso el motivo por el cual todo un gobernador del Señorío, un afamado campeón africano, viene a morir a Agüimes, lejos de su isla de nacimiento. Nuestra hipótesis es la siguiente: El Señor de las islas de Lanzarote y Fuerteventura, primer conde de Lanzarote y a partir de 1584 primer marqués de Lanzarote, don Agustín de Herrera y Rojas, debió castigar con la pena de destierro a su ilustre vasallo después de que este estuviera a punto de darle muerte al encontrarlo en amores ilícitos con su hija en su casa familiar. Puesto que la extraña muerte de Teodoro Espelta puede situarse dos años antes del nacimiento de Constanza de Herrera a quien el marqués considera su verdadera hija porque la anterior, Juana de Herrera, había sido concebida cuando Bernardina aún estaba casada con el genovés, podemos pensar que el incidente violento que obligó al conde a huir de la casa de su amante tuvo lugar antes de 1570, fecha aproximada de nacimiento de Constanza de Herrera, si tenemos en cuenta que esta casó con Gonzalo Argote de Molina en 1586. Las fechas cuadran pues con aquella en la que Diego Cabrera de León estuvo avecindado en Agüimes, villa a la que debió dirigirse acompañando a su padre en el destierro. Los motivos para elegir ese destino no están claros pero no queremos dejar de hacer referencia a que Agüimes es también un señorío en manos de los obispos de Canaria en el que al igual que en el de Lanzarote y Fuerteventura hay una importante presencia de la colonia andaluza. Citaremos como curiosidad que una de las hijas de Luis de León el viejo y Elvira Pérez Hernández, llamada Juana Pérez, estuvo casada con Benito Díaz de Morón, quien era hermano (ver el artículo anterior: Ascendencia andaluza en el Señorío de Agüimes) de Hernando Díaz de Morón, casado con Luisa Bermúdez y Ordoño, padres de Juana Melián, la esposa de Juan Alemán el viejo.
A la muerte de Luis de León, Diego regresaría al Señorío de las islas pues lo vemos testificando en Betancuria en 1596, cuando aún vivía el marqués, por lo que hay que pensar que el castigo señorial no afectó a sus hijos, como se acredita en los antiguos protocolos de Fuerteventura y en las actas del cabildo de esta isla, de principios del siglo XVI, donde se comprueba que los León siguieron ostentando cargos civiles y militares de relevancia.

D) MARÍA DE LEÓN Y COSME DÍAZ
Testamento del primer marqués de Lanzarote don Agustín de Herrera y Rojas en 1598 poco antes de morir (Cláusula novena)
Ytem, mando que a María de León mi mosa, que el día de oy tengo en mi casa y serbissio, la cual yo traje de Sevilla, digo del Puerto de Santa María y me a servido a mi voluntá con mucha fidelidá y linpiesa abrá diez años, poco más o menos, se le den las rropas de su bestir que el día de hoy tiene, y cama en que duerme, y fuera desto se le den duzientas doblass por ssu serbisio para ayuda a su cazamiento; las quales se le den en un esclavo negro llamado Francisco, quel día de oy tengo, en mil reales y dos yeguas buenas y un potro de tres años de los que tengo, en lo que se apressiare, y lo demás en contado y todo se pague de mis bienes. Y ansí mesmo mando que sse le den en este pagamento dos vacas buenas y dos camellos y todo sse apressie por Juan Gopar”.
Hemos de reconocer que este documento nos dejó en un mar de dudas puesto que, por sus circunstancias de tiempo y lugar, María de León, la moza del marqués, podía perfectamente ser la esposa del portugués Cosme Dias de Sequeira y la hija mayor de Luis de León el valiente y de su segunda esposa Juana Pérez de Munguía. Es una extraña coincidencia de nombres y fechas en cualquier caso. Si fueran la misma persona, habría que pensar que el matrimonio de María con Cosme fue posterior a la muerte del marqués cuyo óbito tuvo lugar ese mismo año de 1598. Nos extraña sin embargo grandemente que el marqués no cite a sus padres haciendo mención al hecho, después de corregir un error inicial, de que fue recogida en el Puerto de Santa María. Si efectivamente es la hija de Luis de León el valiente y de su esposa morisca, como dicen las fuentes consultadas en el Archivo Diocesano, no entendemos muy bien qué sentido tiene ignorar su ascendencia: quizá el de beneficiar a su progenie evitando el reconocimiento de la lacra que era en aquellos tiempos provenir “de mala raza” de infieles.También podría pensarse que el nombre de Luis de León es un nombre maldito en la casa del marqués por las razones ya conocidas.
Dichas fuentes del Archivo Diocesano, además de lo ya señalado, nos dicen que María de León era hija de Luis de León el mozo y de su esposa morisca Juana Pérez de Munguía, la cual era natural de Haría y hermana de María Bilbao casada con Pedro Hernández, dato esto último que no nos concuerda con la información anterior relativa al nombre de sus hermanas, a menos que esta hubiera fallecido con anterioridad.
Ascendencia de Luis de León.
Documento del siglo XVIII
Nos decantamos por pensar, dadas las extraordinarias coincidencias de fechas y nombres, que ambas, la moza del marqués y la hija de "la salmona”, constituyen una misma persona de quien se desea ocultar el origen. El marqués pudo acoger a la hija de Luis de León, cuando niña, después de que este cayera en desgracia, y dotarla para su casamiento con Cosme Díaz. En todo caso precisamos que en la pregunta a ella referida en la información de limpieza de sangre que ahora comentaremos se da por sentado que María de León era natural de la isla de Lanzarote.
El que fue su marido, Cosme Díaz, llegó de Portugal antes del año 90, cuando era todavía un mozo, por lo que las fechas cuadran para apoyar nuestras conjeturas. Así lo declaran diversos testigos en la Información de Limpieza de sangre realizada en 1631 a petición de Luis de León Cáceres, por quien sigue la línea, en la que se señala que este era “hijo legítimo de Cosme Díaz y María de León, vecinos de esta isla que hoy viven …y que el dicho Cosme Días es natural de la Ciudad de Oporto del Reyno de Portugal y ha más tiempo de 40 años que reside en esta isla”…Otro dice que 50 años. Y otro señala que Cosme es conocido por el testigo desde mozo, antes de que se casase.
Los sucesivos declarantes nos informan de que Cosme vino acompañado de su hermano mayor, un fraile agustino que por entonces estaba en “el convento de su religión” (sic) en la Ciudad de La Laguna. Otro testigo nos da la posible clave del motivo de su llegada a la isla cuando dice que conoció a Pascual Díaz, su tío, vecino de la isla de La Madera donde eran tenidos (sus familiares) por hombres limpios y cristianos viejos. Deducimos de estas palabras que los hermanos Díaz, aunque nacidos en Sequeira, freguesía de Sequeiró, debían ser estantes en Madeira cuando el conde de Lanzarote estuvo allí destinado allí como capitán general, entre los años 82 y 84. Las relaciones establecidas durante su mandato pueden explicar la arribada de súbditos luso-españoles de dicha isla (Portugal y España estaban unidas por entonces) después de que las razias de Morato Arráez en 1586 hubieran determinado la despoblación de Lanzarote. Además de la captura de rehenes por parte de los asaltantes berberiscos para cobrar rescate por ellos, la pérdida de habitantes vino dada por la huída hacia otras islas de muchos vecinos y también, fue muy notorio, por la deserción de muchos moriscos lanzaroteños que se pasaron al “enemigo” en cuanto pudieron. ¿Qué otra cosa podían esperar después de que ellos o sus padres hubieran sido secuestrados y convertido en esclavos?
Freguesía de Sequeiro-Portugal
Tuvo que ser una inmigración de tipo familiar la que afectó a los Díaz pues otro testigo señala que un pariente de Cosme llamado Álvaro González había sido vicario de Lanzarote y era en aquel momento, 1631, racionero de la catedral de Canaria.
Lo más llamativo de la Información es que no se interroga en ningún momento a los testigos acerca de la ascendencia de la madre de Luis de León Cáceres (ver la foto adjunta). Solamente se interesan por el linaje de su padre, relegando el de su madre, y por la doble ascendencia de estirpe betancuriana, que es a la que se quiere dar realce, de su esposa, Catalina de Barrios. El testigo que más se atreve a hablar del tema, de aquellos cuya declaración conservamos, Salvador Hernández el viejo, después de referirse en buenos términos a la ascendencia de Cosme, llega a decir:
“…y lo propio de la dicha María de León su mujer, conocida por tales e hija y nieta de tales padres y abuelos, vesinos y naturales que an sido de esta Ysla…”
Como pueden comprobar Salvador Hernández ni siquiera llega a citar a los padres de María. De todos era sabido que María de León era la hija del difunto Luis de León el valiente y de su esposa morisca tras la muerte de Ana de Cabrera, Juana Pérez de Munguía, apodada la Salmona, pero nadie osa decirlo… ni la justicia se interesa por preguntarlo. Puesto que las pruebas se realizan en Lanzarote ante el escribano de la isla habría que presumir cierta connivencia de las autoridades en el procedimiento de limpieza de sangre, conjetura que se vería reforzada si se confirmase que María León había sido durante diez años la moza del marqués.


NOTA: La segunda parte de este artículo versará sobre los avatares y descendencia del matrimonio formado por Luis de León Cáceres y su esposa Catalina de Barrios, los motivos del traslado familiar a Gran Canaria y la continuidad de su linaje en Guía portando el apellido Betancor. Adjuntaremos además por gentileza de Juan Ramón García Torres la transcripción completa de la limpieza de sangre citada de 1631.

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